Howl review


Título original: Howl

Año: 2015

Duración: 89 min.

País: Reino Unido

Director: Paul Hyett

Guión: Mark Huckerby, Nick Ostler

Música: Paul E. Francis

Fotografía: Adam Biddle

Reparto: Ed Speleers, Holly Weston, Elliot Cowan, Amit Shah, Sam Gittins, Shauna Macdonald, Duncan Preston, Ania Marson, Rosie Day, Calvin Dean, Sean Pertwee, Brett Goldstein


Buen diseño de criaturas y muy poco más.

Hay temas manidos en el mundo del cine, de las que has visto ya doscientas películas sobre lo mismo y más que vas a ver. Géneros como el romántico o el western tienen casi siempre las mismas bases en todas sus películas. Y tres cuartos de lo mismo pasa con vampiros, momias, el monstruo de Frankenstein, o... los hombres lobo. Howl es una película de terror con estas simpáticas criaturas y, bueno, es correcta en general pero no verás innovación en ningún momento.

Durante el trayecto en un tren nocturno, un atropello fortuito a un ciervo obliga a éste a detenerse en medio de la nada. Al poco serán atacados por un depredador que no parará hasta acabar con todos.

Y esa es la película, argumentalmente ya está explicada. Hay cierto esfuerzo en definir a los personajes, empezando con una muy buena escena de presentación siguiendo al revisor pidiendo los billetes y mostrándolos con un comportamiento mientras están tranquilos y otro distinto en las escenas de más estrés, los que parecen más inofensivos pueden ser héroes en diferentes circunstancias, otros más cobardes y los más gallitos pueden ser un lastre en situaciones comprometidas. Saliendo de estos detalles no hay mucho más, toda la acción ocurre dentro de los vagones del tren, pero con un gran trabajo de Adam Biddle en la fotografía y ambientación no se hace pesado en ningún momento.

Dirige su segundo largometraje (tras la genial The Seasoning House), la leyenda viva en el campo del maquillaje y prótesis, Paul Hyett. En el terreno de dirección no busca romper el molde en ningún momento y hasta parece que ocurren pocas cosas, supongo que  por motivos presupuestarios. No me gustó que la cámara esté a pulso, está técnica se utiliza para escenas más dinámicas pero una película entera así... cansa. Protagoniza Ed Speleers (Eragon, Love Bite) y Holly Weston (John Carter, Splintered) con unos papeles algo sosos, Ed todavía tiene algo de carisma pero de Holly no hay mucho que decir, creo que no hace nada en toda la película. Lo mejor de largo es el diseño de los hombres lobo, se les nota reales y horribles, muy agresivos y todos distintos. Se nota que es el punto fuerte del director pues el resultado es formidable. Hay algo de CGI pero solo en casos de fuerza mayor, larga vida al trabajo artesanal.

En conclusión, es una película curiosa que no destaca en nada salvo en el diseño de las criaturas, hay alguna escena de acción interesante pero son muy pocas en total. Si te gustan mucho las películas sobre el hombre lobo puedes darle una oportunidad, si en cambio no tienes un especial interés hay opciones mejores por ahí.

Firma: Oriol Hernández.