Top 10 mejores películas TerrorWeekend 2023 - Javier S. Donate


Háblame (Review)

El primer puesto es para el debut cinematográfico de los señores del canal Rackaracka: los hermanos Michael y Danny Philippou. Háblame es una película que resulta doblemente inesperada primero debido a que surgió de la nada tras su premier en Sundance y segundo porque rebosa un clasicismo y un buen saber sorprendentes en gente tan joven; comentar que una de las bazas es un lore muy sencillo – la mano y las posesiones – que los directores/guionistas saben reconvertir en una película imprevisible. Repleto de hallazgos, potentes golpes de terror y un casting muy certero, Háblame es un gran bautismo y esperemos que sea el principio de una carrera repleta de títulos tan interesantes o mejores que este.



Posesión Infernal: El Despertar (Review)

Es curioso pero el cine comercial lleva unos cuantos años llevándose la palma respecto al mundo del terror, si ya hemos hablado de Háblame (y Scream VI no está en la lista porque solo caben diez títulos) el irlandés Lee Cronin llevó a la pantalla grande un divertidísimo, salvaje y sangriento reboot/retcon/ampliación del universo Evil Dead. La película no solo está en consonancia con la saga original y la injustamente tratada película de Fede Álvarez, sino que también es capaz de llevarse la mitología a la gran ciudad y convertirla en una montaña rusa que va como un tiro, perfecta para entrar en la saga y también repleta de guiños para los fans de Evil Dead.



Home For Rent (Review)

Sophon Sakdaphisit trae la propuesta tailandesa de terror del año, con una historia lejanamente basada en hecho reales que mezcla drama y cultos chungos. Al igual que su película más famosa, Laddaland, el foco de la historia está puesto en un ambiente familiar que se rompe con la irrupción de lo sobrenatural. Home For Rent necesita paciencia, ya que arranca con tanta fuerza, con tal exceso de jumpscares y situaciones forzadas que más de uno querrá tirar la toalla, pero cuidado porque el director está jugando con el espectador ya que a los cincuenta minutos la historia empieza a reescribirse una y otra vez, añadiendo más elementos de terror y sobrenaturales. Atención a su final tan emocional como emocionante.



Cuando Acecha La Maldad (Review)

Aunque hay momentos en que la propuesta de Demian Rugna agota por acumulación, ¡Y qué demonios: es imposible mantener un ritmo tan brutal durante los 90 minutos de metraje!, lo cierto es que Cuando acecha… es terror en estado puro, capaz de coger un tema tan manido como las posesiones y llevarlo a territorios desconocidos. Ya en los primeros 30 primeros minutos de la película Rugna ha creado el universo entero de los embichados que, en buenas manos y cuidando el lore, puede convertirse en una sólida franquicia.



Sleep (Review)

Uno se enfrenta de nuevas a películas como esta y se pregunta: ¿Puede ser interesante una historia sobre una embarazada y un señor con sonambulismo? La respuesta es SI, porque Jason Yu hace magia en su opera prima y apenas con tres o cuatro localizaciones y media docena de personajes, regala al espectador una película tensa, hipnótica, que obliga al espectador a moverse entre los real, lo sobrenatural y la locura para decidir en qué lugar colocarse. Además, un bonus impensable en el cine coreano: dura solo hora y media, aparte de saber cuándo terminar en vez de hacer como otras películas coreanas que tienen cuatro o hasta cinco finales.



La Espera (Review)

Posiblemente el regreso a España de F. Javier Gutiérrez sea la película más contracorriente de todas las propuestas españolas de terror durante 2023, no solo debido a su temática sino al slow burning de una historia minimalista. A pesar de esa trama que mezcla distintos géneros, La Espera desprende amor tanto en el aspecto técnico como el interpretativo, y la cámara de Gutiérrez que huye de los convencionalismos del ahora y el hoy en una película que polariza al público: entra al juego o se aburre.



La Conferencia (Review)

Resulta paradójico que el slasher más divertido del año no solo venga de Suecia, cuyos acercamientos a este género siempre han resultado muy convencionales, sino que encima se haya estrenado directamente en una plataforma tan familiar y poco arriesgada como Netflix. La película de Patrik Eklund está repleta de personajes asquerosos, para qué negarlo, pero que abarca un sorprendente abanico de edades ya que tenemos hasta señores barbudos a punto de jubilarse. El diseño del asesino es tan absurdo como novedoso y la verdad es que funciona bien la mezcla de terror, comedia y denuncia social.



Black Mass (Review)

Película que incomprensiblemente no ha conseguido despegar en el circuito de festivales de género. La ópera prima de Devanny Pinn recuerda fuertemente a la gran Black Christmas de Bob Clark no solo por el enfoque visual sino porque su historia también se ambienta en los años 70. Black mass cuenta una historia real – algo que hace que duela mucho más cuando llegan unos ataques resueltos de forma tan hiperrealista como cruda – ocurrida en los años setenta, cuando un stalker se dedicó un día entero a espiar a las jóvenes de una casa universitaria antes de atacarlas. Sorprende muy positivamente la decisión de Pinn al colocar siempre la cámara tras el atacante, de forma que el espectador “siente” la realidad desde su punto de vista, esto unido a un muy buen trabajo sonoro y a la impresionante fotografía de Noah Luke, genera tanta inquietud como tensión.



There’s Something in the Barn (Review)

Es difícil encontrarse películas de terror no solo para los pequeños de la casa sino para disfrutar en familia desde los 7 a los 99 años, algo que consigue There’s Something in the Barn, coproducción entre Noruega y Finlandia dirigida por Magnus Martens y escrita por Alekssander Kirkwood Brown junto a Josh Epstein. Sin negar la inspiración directa de Gremlins – hay set pieces muy parecidas – There’s Something… es capaz de lograr su propio universo gracias a personajes carismáticos, tratar sobre la navidad sin resultar empalagosa, chistes sobre los estadounidenses y finlandeses, y buena función de FX prácticos y de CGI. La cuidada mezcla de terror, comedia y humor negro la convierte en una película dinámica para ver (y revisar) cualquier noche familiar.



Godzilla: Minus One (Review)

Los milagros existen, más en épocas navideñas como las de este top, y aunque las películas monsterverso de Legendary son entretenidas, nadie mejor que un japonés - en este caso Takashi Yamazaki – para entender la naturaleza del Kaiju eiga Godzilla. ¿Es verdad eso que dicen sobre que es la mejor película de Godzilla hasta la fecha? Es cierto que roza el podio de la película seminal de 1954 aunque sin la obra de Ishiro Honda y Shigeru Kayama no existiría Minus One, pero lo innegable es que se trata de la entrega más emocional, con los personajes humanos más reconocibles y con mayor entidad hasta la fecha. Atención el mimo que hay para utilizar el increíble tema musical de Godzilla compuesto por Akira Ifukube en 1954, lo que muestra que para Yamazaki, este Godzilla: Minus One es La Película, o mejor La Carta de Amor, que un fan de Godzilla ha hecho tanto para los fans como para los profanos.