Un Lugar Tranquilo review


Título original: A Quiet Place

Año: 2018

Duración: 95 min

País: Estados Unidos

Director: John Kraskinki

Guion: Scott Beck, John Kraskinki, Bryan Woods

Música: Marco Beltrami

Fotografía: Charlotte Bruus Christensen

Reparto: Emily Blunt, John Krasinki, Noah Jupe, Millicent Simmonds, Cade Woodward, Evangelina Cavoli, Ezekiel Cavoli, Doris McCarthy


Explorando los nuevos límites de la tensión.

En una era en las que en las películas de terror (y en el resto de los géneros) impera la falta de ideas, las infinitas secuelas y la mediocridad, de vez en cuando encontramos cintas con una buena idea, una buena producción y un impresionante reparto que hace que destaque por mucho sobre el resto. El año pasado tuvimos Déjame Salir, y en 2016 No Respires. Cinta con muchos paralelismos con esta. Y en 2018 nos ha llegado Un Lugar Tranquilo, probablemente una de las mejores cintas comerciales de terror de este año.


En un futuro cercano la raza humana ha sido prácticamente erradicada por unas extrañas criaturas que los cazan sin piedad ni descanso. Una familia permanece unida y en continuo movimiento con una serie de estrictas normas para asegurar su supervivencia.

La cinta que no deja de ser una monster movie al uso, utiliza las pequeñas diferencias que propone para crear una identidad propia. Estas serían por supuesto, el silencio, es una película prácticamente muda (de ahí las similitudes con No Respires) que lleva este elemento hasta el límite en la que llega a contagiar al espectador de manera involuntaria y que acaba apoyando a la familia protagonista con absoluto silencio. Y es que la química que existe entre los personajes es total y muy necesaria para que puedas meterte convenientemente en la historia. Ese sería uno de los elementos básicos que describen el triunfo de esta cinta. Otra sería el genial trabajo en los efectos sonoros y la sutil banda sonora, más ambiental que melódica. Y aunque la cinta no es perfecta sí que deja un fondo positivo tras acabarla y la sensación de que ha sabido jugar bien sus cartas hasta el final.

En cuanto a los mencionados puntos negativos veo uno bastante grande y dos que quizás no se han hecho todo lo bien que se podría, el grande es la locura que supone el hecho de que el personaje de Emily Blunt esté embarazada. No tiene ningún sentido, no se puede tener peor idea, y si bien entiendo que es necesario como catalizador pienso que se podría haber pensado en otra cosa, pues sus personajes son inteligentes pero esa idea es muy muy estúpida. Los otros dos serían la lenta introducción, necesaria para empatizar con la familia pero algo larga y la otra es en su sucesión de acontecimientos en su parte final, no pueden tener peor suerte.

Dirige, coescribe y coprotagoniza John Krasinki (The office, Detroit), en cuanto a la dirección es su primera cinta de terror y para nada se le nota nervioso. En lo que si destaca es en la dirección de actores, pues aunque sea un reparto muy corto todos están estupendos, del personaje de Emily Blunt (Al filo del mañana, Sicario) ya nos lo esperábamos, pero congratula comprobar que los niños también están magníficos, a destacar la joven Millicent Simmonds quien, al igual que su personaje, tiene discapacidad auditiva.


Cinta con similitudes con Señales (M. Night Shyamalan, 2002), Mars Attacks! (Tim Burton, 1996) y la mencionada (por tercera vez) No Respires (Fede Álvarez, 2016), pero con identidad y recursos propios que consiguen que tengas la sensación de que no habías visto antes una película como esta. Muy recomendable.

Firma: Oriol Hernández.