Hotel review


Título original: Hotel

Año: 2012

Duración: 12 min.

País: España

Director: José Luis Alemán

Guión: José Luis Alemán

Música: Arnau Bataller

Fotografía: David Azcano Losa

Reparto: Pedro Lozano


¿Vivimos dentro de un espejismo?

Lo primero que se nos viene a la cabeza cuando empezamos a visionar Hotel, son los decorados de la celebérrima El Gabinete del Dr. Caligari. El tan debatido expresionismo alemán está presente en toda la duración de la cinta, decorados, sensación de ahogo, realidad distorsionada, y todo ello con el fin de reflejar la angustia del único protagonista, un alma extraviada y errante dentro de un mundo desconocido e irritante.

En esta personalísima obra, José Luis Alemán hace un alarde de imaginación, jugando un poco con la curiosidad del público, que asiste expectante a la sucesión de unas bellísimas imágenes, que se adentran, aunque sea levemente, en el mundo de los sueños. La mejor manera de definirla es decir que es un cuento, un tanto macabro por cierto y que tiene un final rompedor. Os habréis dado cuenta del cuidado que pongo en no explicar más de lo necesario, un análisis más profundo conllevaría haceros un spoiler, nada más lejos de mi intención. Lo que intento es que os sintáis atraídos por un corto de suma calidad.

Un hombre vaga por un desierto a punto de perecer. De pronto ante él aparece un hotel. Para su desgracia no se trata de un simple espejismo, sino de algo mucho más aterrador.

Basada en el cómic sueco Cinema Panopticum, Hotel es un film sumamente original, empezando por los decorados, de cartón y creados a tamaño real para la ocasión; siguiendo por una historia efectista y no exenta de moraleja; y acabando por el mimo puesto en su realización. La narración transcurre sin sobresaltos, aunque parezca que de un momento a otro tenga que pasar algo que nos haga caer de la butaca. Es mérito evidente de un guión muy bien trenzado, con un ritmo envidiable y que nos aboca a un desenlace sorprendente. Después de él me temo que más de uno piense que no ha valido la pena esperar, hay muchas maneras de explicar un cuento, esta, para mí es muy de alabar. Magnifica la interpretación de Pedro Lozano, que cual Cesare, anda dando tumbos en un mundo que no entiende y que hace de él un títere. Destacar también la fotografía de David Azcano ya que ha de lidiar con unos planos un tanto extraños, saliendo airoso en todos ellos.

Para finalizar comentar que en el prolífico mundo del corto nos encontramos con un poco de todo. Rara vez consideramos que en este formato una obra pase de un cierto nivel, ¿estamos pensando en el tema económico?, no es este el caso, su calidad se evidencia del primer al último minuto. Excelente.

Firma: Josep M. Luzán.