Climax review


Un grupo de jóvenes, de distinto género, raza, religión u orientación sexual, se recluye durante tres días, en un colegio abandonado, con la idea de formar un grupo de baile que hará una gira por Francia y Estados Unidos. Tras el último, y exitoso, ensayo, comienza una fiesta en la que todos se verán abocados a la violencia y el sexo.

Título original: Climax

Año: 2018

Duración: 95 min.

País: Francia

Director: Gaspar Noé

Guion: Gaspar Noé

Música: VVOO

Fotografía: Benoit Debie

Reparto: Sofia Boutella, Kiddy Smile, Giselle Palmer, Romain Guillermic, Souheila Yacoub.


Gaspar Noé lleva el clímax hasta las últimas consecuencias.

Con tan solo cinco películas en su haber el argentino, afincado en Francia, Gaspar Noé se ha ganado un lugar en el imaginario cinematográfico gracias a sus rompedoras propuestas visuales y narrativas: Seul contre tous,  Irreversible, Enter The Void, Love o este Climax han hecho correr ríos de tinta a favor o en contra. Cada nuevo proyecto del director hace que los seguidores pongan en marcha la cuenta atrás hasta el estreno mientras, en las sombras, sus detractores afilan los cuchillos.


Un grupo de jóvenes, de distinto género, raza, religión u orientación sexual, se recluye durante tres días, en un colegio abandonado, con la idea de formar un grupo de baile que hará una gira por Francia y Estados Unidos. Tras el último, y exitoso, ensayo, comienza una fiesta en la que todos se verán abocados a la violencia y el sexo.

Basada en un hecho real que tuvo lugar en Francia durante los años 90, la película empieza con un golpe al espectador, rompiendo el esquema clásico de Principio/Desarrollo/Final, para acto seguido deslumbrar con un baile arrollador, rodado en un arriesgado plano secuencia, que debería pasar a los anales del cine musical debido a su ritmo y milimétrica coreografía; más de un espectador se quedará con las ganas de levantarse a bailar.

Noé, en los primeros minutos de la cinta presenta a un nutrido grupo de personajes y es mérito suyo, y del encargado de vestuario Fred Cambier, que el espectador sea capaz de identificarlos, y odiarlos llegado el momento, gracias a las conversaciones entre unos y otros; en estos diálogos, que parecen improvisados aunque no lo sean, el director no solo muestra las personalidades de cada uno sino que deja entrever las relaciones existentes y planta la semilla de lo que está por llegar.

La caída en desgracia de estos bailarines con ganas de triunfar, no solo es mérito del férreo control que Gaspar Noé imprime en el espacio/tiempo, con una cámara inquieta que parece espectador y protagonista al mismo tiempo, sino también de sus colaboradores habituales, empezando con la increíble fotografía de Benoit Debie que ilumina cada habitación y pasillo de forma tal que un espacio que, en principio es un simple lugar de paso,  se va degradando hasta convertirse en la antesala del infierno o un afterhours; otro de los abonados a las locuras del director, el técnico de sonido Ken Yusamoto, amplifica las sensaciones del espectador abarrotando sus oídos con música, gritos y sonidos en off.


Sofia Boutella encabeza el cartel, interpretando a Selva, pero sería injusto no mencionar el trabajo actoral ya que todos, sin excepción, tienen su momento de gloria, dan lo mejor de sí mismo y trasmiten al espectador la violencia, el deseo y la desesperación que van creciendo en su interior desde el baile del principio hasta la mañana siguiente.

Climax no se detiene en ningún momento, su duración de 95 minutos es ajustada y, sin embargo, puede resultar aburrida e incómoda debido a un ritmo que salta de lo acelerado a lo lento, de simples conversaciones anodinas a situaciones tensas que hacer temer lo peor, de increíbles bailes donde los bailarines parecen flotar en el aire a estallidos de violencia y, sobre todo, al uso y abuso de la cámara que, en sus momentos finales, puede resultar agobiante.

Clímax gustará sobre todo a los seguidores del universo personal de Gaspar Noé, ya que es una cinta arriesgada y muy personal, pero si tienes la mente abierta y disfrutas la experimentación visual, no puedes dejar pasar este baile.

Firma: Javier S. Donate.