Entrevista a Baptiste Drapeau y Mauricio Carrasco, director y coguionista de The Lodger

Foto de Jose Manuel Medina

Entrevista efectuada en Fancine Málaga 2021 a Baptiste Drapeau y Mauricio Carrasco, director y coguionista de The Lodger.


Tu primera película, Venir sur ses pas, es una comedia dramática y luego ruedas el cortometraje de horror Canine Panique. ¿Cómo es este cambio de registro tan curioso?

Baptiste Drapeau: ¡Sí! Además, Half and Half es un corto de animación situado en la edad media, The Maneater una comedia policíaca y en The Lodger hay códigos del cine de horror. Me gusta pasar de un género a otro, alejarme todo lo que pueda del anterior. De hecho, Pin Pon, cortometraje que estoy terminando, es una comedia romántica.


Y The Lodger mezcla elementos de terror con una especie de cine negro.

Baptiste Drapeau: efectivamente, en The Lodger hay varias tonalidades que coexisten. Es un equilibrio que me gusta buscar en mis películas.


A la hora de escribir el guion, ¿cómo surge la historia?

Mauricio Carrasco: de un guion de Ollivier Briand, quien tuvo la idea de la película tras un duro momento personal. La escribió durante dos años y luego Baptiste y yo reescribimos la historia para adaptarla al cine de Baptiste, tratando siempre de respetar la esencia del guion de Ollivier.

¿En qué elementos incidisteis del guion original al vuestro?

Baptiste Drapeau: primero redujimos la historia, porque la película era de más de dos horas así que había que adaptarlo al presupuesto del que disponíamos. Luego, por un lado centramos el guion en la historia de amor de Julie, y por el otro reforzamos el hecho de que Elizabeth es su antagonista sin ser mala. Las dos, en cierta forma, son víctimas del amor, que se les escapa de las manos. Además, desarrollamos el onirismo de la película. De esta forma, el espectador vive el enamoramiento progresivo de Julie. Siempre desde su punto de vista, un punto de vista donde todo es posible. Creo que es también gracias a ello que, al final de la película, es difícil saber si el objeto de su amor es locura o realidad.

Mauricio Carrasco: el proyecto original era un thriller psicológico con una historia romántica en telón de fondo. Hoy es al revés.


¿Cómo creaste la química entre Jacqueline Bisset y Alice Isaaz?

Baptiste Drapeau: ajustamos los personajes en función de las lecturas de guion, para hacerlos a sus medidas. A pesar del poco presupuesto que teníamos, ellas se comprometieron profundamente y al final entendían tan bien a sus personajes que al rodar yo solo tenía que mirarlas, porque la magia aparecía inmediatamente.


Después de las primeras lecturas, ¿Tuvisteis que meter cambios en los personajes?

Baptiste Drapeau: no se ha cambiado nada en la estructura del guion, pero tuvimos que reescribir algunos diálogos para hacerlos más precisos; tanto Jacqueline Bisset como Alice Isaaz hicieron propuestas y reescribimos en función de ellas.


¿Cómo fue trabajar con una actriz de tanto renombre como Jacqueline Bisset?

Baptiste Drapeau: es muy humilde. Inmediatamente supo lo que yo buscaba. Su interpretación tiene la espontaneidad e inocencia de un niño, y eso viene de su rigor. Hace preguntas muy concretas sobre su papel: ¿Cómo se viste? ¿Con qué camisón duerme? ¿Qué desayuna? Luego, actúa sirviéndose de lo que tiene dentro, tiene una interpretación muy visceral.

Habéis manejado todo tipo de géneros en cortometrajes y largometrajes. ¿Para vosotros cuál es el género con las reglas más complicadas?

Mauricio Carrasco: es cierto que tienen códigos específicos, pero dentro de ellos hay una gran libertad. Por ejemplo, en Canine Panique que hicimos hace unos años, el vampiro no es un peligro para nadie. Ni siquiera puede chupar sangre porque se le rompieron sus colmillos, y es por eso que va a ver a Wanda, el personaje principal, que es dentista. A partir de un ícono de las películas de horror se puede hacer un personaje de comedia negra. Y si el vampiro se enamora, una comedia romántica. Y si los personajes estaban enamorados antes de que él se volviese vampiro, ¡Pues se transforma en un drama romántico!

Baptiste Drapeau: para mí, no hay géneros más complicados que otros. Lo difícil es sostener un estilo, sobre todo cuando no es naturalista. Una película como The Lodger es un mundo con sus propios códigos que hay que inventar, no existe el referente a lo real, por lo que hay una infinidad de posibilidades. Lo importante es dar coherencia a este mundo, una textura única que va a dar una singularidad a la película.


¿Cuáles son vuestros próximos proyectos?

Baptiste Drapeau: acabamos de rodar un videoclip de Pablo Chill-E con Quilapayún, Inti-Illimani y Matanza. Luego hemos escrito una comedia policíaca, para la que estamos buscando financiamiento.


¿Cuál es vuestra película de terror favorita?

Baptiste Drapeau: no sé si es mi película favorita de terror, pero diría Mother! de Darren Aronofsky. Para mí, es una de las películas más inventivas y audaces de los últimos años.

Mauricio Carrasco: Alien de Ridley Scott.