Entrevista a Tony Dean Smith. Director y coguionista de Volition

Entrevista realizada a Tony Dean Smith. Director y coguionista de Volition.


¿Cómo surge la historia?

Me sentía un poco atrapado en mi vida, casi resignado a que jamás rodaría las películas que yo quería. El ser prisionero de mi estado de ánimo es lo que me ayudó a crear a James: es un prisionero de sí mismo y una visión de su muerte le despierta de un futuro predeterminado. En cuanto me di cuenta de lo que James y yo nos parecíamos, supe que había dado con un personaje y una historia que me interesaba tanto a nivel personal como profesional.


Cuál es, para ti, la importancia del guion.

Le doy gran importancia. Las historias/guiones, son el origen y sin ellas no habría nada que rodar.  De todas formas, el guion es como el mapa.  Es un mapa, no el tesoro. El tesoro es la película y soy un gran partidario de que la última revisión del guion tenga lugar en el proceso de montaje. La película es un testimonio de ello. Aunque rodemos todo lo que hay en la página, también tenemos que ser capaces de improvisar durante el rodaje y re imaginar cosas en el montaje.

¿Te fijas en la vida real para crear tus personajes?

Probablemente lo hago a nivel subconsciente, pero tiendo a fiarme más de mi imaginación. Una vez que he perfilado un personaje (generalmente un cliché) empiezo a preguntarme quiénes son, qué les hace ponerse en marcha y por qué. Supongo que tiendo a confiar en mí mismo y en la vida. Intento ver cómo me parezco a James, Angela, Ray, Sal, Terry o Elliot.  Son personajes que hablan acerca del destino y la autodeterminación y representan partes de mí.


Cómo ha sido el salto de cortometraje a largometraje y lo más complicado de este cambio.

Ha sido genial. Prácticamente el mismo proceso, aunque durante mas días y muchas menos horas para dormir.
Lo que más me ha gustado han sido los lazos familiares que creas durante el rodaje. Nada como eso.
Escribir Volition es/fue el guion más complicado que Ryan (co-escritor, productor y hermano) y yo hemos escrito. Todavía nos estamos recuperando. Lo más dificil es que sabíamos que estábamos contando la historia de un universo predeterminado y fatalista y la historia de un hombre que sabe lo que ocurrirá. Así que crear todos los giros, las situaciones fue complicado porque siempre teníamos que contar con los protagonistas. Tenemos diagramas, carteles y, literalmente, otro guion de cien páginas. Y todo esto antes de rodar.


¿Qué fue lo más complicado del rodaje?

Todo. Empezó conmigo enfermo durante la preparación y nuestra primera semana de rodaje. Como la historia se cuenta desde distintos puntos de vista tenía que saber dónde y cuándo estaba cada personaje y donde colocar nuestra única cámara (Si, casi todo lo rodamos con una cámara). Solo teníamos dieciocho días de rodaje (deberían haber sido 30) y estoy muy orgulloso de nuestro casting y del equipo. Siempre había sonrisas en el set y creo que se refleja en pantalla nuestro amor y pasión.


Cuáles son tus principales influencias.

Mi obsesión con el cine empieza con Steven Spielberg y E.T.  Me impactó la idea de un niño solitario de la tierra y su amigo alienígena haciendo el mundo, incluso su vecindario, un lugar mejor. Crecí en Sudáfrica, así que pude empatizar con la película. Para mi este es el gran regalo de Spielberg: tener personajes que aprenden a ser buenos. Después vino Oliver Stone y su coraje para ilustrar como el sistema de nuestros gobiernos son escurridizos y no tan limpios como pensamos. Admiro a los artistas que no tienen miedo de iluminar, con verdad y honestidad, acerca de lo controvertido y poco confortable.

Cómo fue trabajar con Adrian y Magda como protagonistas principales.

Adrian y Magda son maravillosos como personas y actores. Les conozco desde hace tiempo y no me imagino esta película con otras personas. Adrián y yo colaboramos en mi trabajo de fin de curso y después en un video musical que casi es una prueba para Volition. Es un artista maravilloso y honesto (por cierto, echad un vistazo a su música). Conocí a Magda en la escuela a la que iba. Su autenticidad me enganchó y supe que debía trabajar con ella en cuanto tuviera una oportunidad. Trabajar con ellos ha sido toda una alegría. Ambos dan lo mejor de sí y es muy difícil elegir qué toma quedarse para el montaje. Una película es tan fuerte como los personajes que tiene, y he sido muy afortunado de haber elegido los mejores actores para interpretarlos.


Tu carrera está enfocada en el género fantástico. ¿Te gustaría explorar otros géneros o te sientes cómodo en el fantástico?

La razón por la que adoro el cine fantástico es que permite explorar temas controvertidos o tabús, jugando con la distancia y las perspectivas. Disfrazamos nuestro mundo para que no parezca el mismo y exploramos aquello que los demás igual no quieren ver. Este es el poder del género fantástico – y además me siento como en casa en este género. Dicho esto, también creo que hay mucho que contar de nuestro maravilloso planeta. Después de todo somos una bola que flota en el espacio…


¿Cuál es tu película de terror favorita?

Tengo una lista de películas que me traumatizaron de niño. Empieza con Alíen de Ridley Scott. Todavía me acuerdo negarme a caminar por un pasillo oscuro en la casa de mi familia, por si el alíen estaba allí esperándome. Sé que el horror real es tremendo, pero el horror sugestivo es mucho más insidioso. Admiro a los directores que te enseñan lo justo en pantalla para que tú, luego, pongas el resto.
Otras películas de terror que me paralizaron son Candy Man, Watcher In The Woods, The Exorcist y ¡Una película sobre el tablero de Ouija que vi de niño!