Tonight She Comes review


Título original: Tonight She Comes

Año: 2016

Duración: 84 min.

País: Estados Unidos

Director: Matt Stuertz

Guion: Matt Stuertz

Música: Wojciech Golczewski

Fotografía: Chris Benson

Reparto: Larissa White, Jenna McDonald, Dal Nicole, Frankie Ray, Adam Hartley, Cameisha Cotton, Brock Russell, Nathan Eswine


Terror sin pretensiones.

La primera secuencia de la película empieza fuerte, bastante explicita y con mucha sangre, te coloca en un prisma sobre lo que vas a ver que encaja con la descripción de terror que esperaba, pero tras proyectar el título en pantalla tienes la sensación de que lo que sigue no es la misma película, porque empieza con el humor más chorra posible de la mano de los personajes que te acompañaran hasta el final de la historia. No, no os habéis equivocado, esta película en realidad es una comedia para echar unas risas en “colegueo”, con sangre y posesiones, eso sí.


Por esto, me tiene un poco mosqueado el hecho de que tanto ese primer teaser al inicio, antes del título del film en pantalla como parte del final de la historia sea más una muestra de película de terror que del inicio y el final del desarrollo cachondo que tiene la historia. O todo o nada.

Un peculiar cartero y su amigo terminan por casualidad en una casa aislada en mitad del bosque, allí conocerán un par de chicas que dicen estar esperando a su amiga que es la propietaria de la casa. Tras estos acontecimientos todo se volverá del revés.

Matt Stuertz, escribe y dirige su segundo largometraje tras RWD (2015), en esta ocasión y a diferencia de la película mencionada escribe el guión de manera individual. Una dirección sin planos complejos en que Matt se ha dedicado a contar la historia de manera ordenada sin querer alterar el curso de los acontecimientos, se podría decir que correcto para este tipo de películas, además de tener en cuenta de que estamos hablando de su segundo film.

El elenco de actores al que podéis llegar a odiar, por los caracteres que interpretan está formado por Adam Hartley, quien tiene el rol de joven pasota y fumado obsesionado con el sexo, bastante común en muchas películas, como podéis observar, Brock Rusell, en el carácter de un personaje bastante desvitalizado que a menudo reacciona incoherente a la situación, Larissa White y Cameisha Cotton hacen de una pareja de pánfilas que quieren pasarlo bien sin mucho más que resaltar, Dal Nicole en un rol más exigente que el resto y Jenna McDonald como Felicity más que correcta en su interpretación.


Considerando que es un proyecto de bajo presupuesto no está nada mal, con algún momento bastante resaltable en la parte final del film, sin complejos ni miedo al qué dirán.

Firma: Gerard FM.