The Redwood Massacre review


Título original: The Redwood Massacre

Año: 2014

Duración: 82 min.

País: Reino Unido

Director: David Ryan Keith

Guion: David Ryan Keith

Música: Leah Kardos

Fotografía: David Ryan Keith

Reparto: Mark Wood, Lisa Cameron, Lisa Livingstone, Rebecca Wilkie, Adam Coutts, Lee Hutcheon, Benjamin Selway, Alec Westwood, Liam Matheson, Morgan Faith Keith, Claire Bearn, Cheryl Bernard, Jamie Butler


Cambio hacha por motosierra, razón Redwood.

Lo bueno de saber lo que uno va a ver es que te evitas las sorpresas. Los fans de los slashers están de enhorabuena, han encontrado un producto realmente competitivo entre ese submundo que a veces nos regala productos de calidad incierta. A los que no seáis muy entusiastas de esto, pues nada, intentar que no os salpique la sangre.

Tiene todos los ingredientes que se le suponen a ese tipo de cine. Primero y primordial el angelito que se encarga de llevar a cabo todas las atrocidades, y que para diferenciarse de los demás ha de tener cierto rasgo característico. En The Redwood Massacre está muy logrado, ya que acongoja bastante su sola presencia. No obstante no abandona la extraña afición de estas hermanitas de la caridad por las armas punzantes. Otra de los detalles de estas películas con las víctimas. Habéis acertado, son adolescentes y no tienen por donde escapar. Evidentemente tampoco falta la “final girl”. ¿Homenaje a films míticos?, puede ser, pero es que todas se parecen.

Cinco amigos deciden pasar unos días en un siniestro sitio, donde con anterioridad se habían cometido unos horrendos asesinatos. Se trata de buscar emociones fuertes, hasta que descubren que la leyenda Redwood esta todavía muy vigente, demasiado...

No me extenderé mucho hablando del guión, puesto que sigue todas las premisas de esta subcategoría dentro del terror. Mantiene, eso sí, toda la emoción hasta el final con un ritmo envidiable ayudado por su justa duración.

David Ryan Keith hace suya por completo esta obra. Si me dieran a elegir en cuál de las facetas está más brillante, sin duda sería la de director de fotografía, sin desdeñar para nada la de los efectos especiales. La sabia mezcla de estos dos ingredientes nos regala unas escenas de acción resueltas de manera brillante. Las tomas gore, bastante abundantes, están realizadas con efectividad y resultan muy impactantes. Es de los que se trata ¿no?

Pasamos a otro aspecto interesante de la cinta que es el de la música. Otra ración de las bellas imágenes, en este caso de los bosques escoceses, mezcladas con una música algo estridente pero que engancha perfectamente y que es obra de Leah Kardos.

No pasaremos por alto las interpretaciones. A Benjamin Selway le toca el ingrato, pero al mismo tiempo agradecido papel del serial killer. Digo lo de agradecido porque al menos no le reconocerán en unos grandes almacenes cuando vaya a comprar utensilios punzantes. El resto de intérpretes cumple su papel. Unos tienen más suerte que otros en cuanto a la duración de sus papeles. La más afortunada es Lisa Cameron a la que le toca interpretar a Pamela, sí la “final girl”.

Nada más que añadir. Os lo pasaréis pipa, y sé que ya estáis añorando pegaros unos gritos en las escenas más escabrosas. ¡Disfrutad malvados!

Firma: Josep M. Luzán.