El Día Trajo la Oscuridad review


Título original: El Día Trajo la Oscuridad

Año: 2013

Duración: 78 min.

País: Argentina

Director: Martín Desalvo

Guión: Josefina Trotta

Música: Jorge Chikiar

Fotografía: Nicolás Trovato

Reparto: Mora Recalde, Romina Paula, Luciano Suardi, Pablo Caramelo, Marta Lubos


Drama terrorífico hecho con calma.

Todo en esta vida tiene su ritmo, el cine, como no podía ser de otra manera, también. De nosotros depende que nos podamos adaptar a él para poder disfrutar de una historia, sea del tipo que sea. ¿Os imagináis El Caballo Turinés de Bela Tarr rodada frenéticamente? Sería otra película y quedaría más encuadrada en una carrera de cuadrigas que lo que en realidad es.

El Día Trajo la Oscuridad es un buen ejemplo de "sin prisas por favor", quizás demasiado, pero a estas alturas seguramente su director ya estará familiarizado con este tipo de críticas. Como no queremos caer en la vulgaridad vamos a sacar un poco de punta al lápiz.

El primer comentario va en la línea de "terror que flota en el ambiente". Cosa que es un tanto difícil de conseguir, como queda demostrado en esta ocasión al faltarle algo de recorrido digamos que opresor a esta cinta. El tema da para mucho y ese abandono de la truculencia y de las escenas escabrosas, no ha sido bien sustituido por eso que hemos comentado antes.

En mi opinión no deja de ser un drama con algo de vampirismo, que casi ni se ve y solo se intuye. Encuadrada en el género dramático funcionaría perfectamente, y los amantes de ese género se lo pasarían en grande con la pareja protagonista que, eso sí, destila química en grandes cantidades. Seguramente su público fiel se llevaría una desilusión al ver como el mal aparece aunque sea tenuemente.

Virginia vive con su padre en su gran caserón. Un día recibe la visita de su prima Anabel que llega desmayada. Extrañas enfermedades azotan a la comunidad sin que se sepa a que pueden ser debido, en principio lo atribuyen a un brote de rabia. La realidad, para desgracia de más de uno, es muy diferente.

Irregular film dirigido por Martin Desalvo al que le toca lidiar con un guión, que resulta un tanto disperso, obra de Josefina Trotta. A su favor juegan no obstante una escenografía muy acertada, la excelente fotografía de Nicolás Trovato y unas buenas interpretaciones encabezadas por Mora Recalde que carga sobre sus espaldas con el peso de tan triste historia. La relación con su prima, interpretada por Romina Paula, es de lo mejor del film.

Sin duda no es una película para levantar el ánimo, es decir que si os gustan las cintas tristes y melancólicas, habéis encontrado un producto digno de ser degustado.

Firma: Josep M. Luzán.