La Cueva review


Título original: La Cueva

Año: 2014

Duración: 80 min.

País: España

Director: Alfredo Montero

Guión: Alfredo Montero

Música: Carlos Goñi

Fotografía: Alfredo Montero

Reparto: Marcos Ortiz, Marta Castellote, Eva García-Vacas, Jorge Páez, Xoel Fernández


¡Terroríficamente asfixiante!

Nos encontramos ante una personalísima obra del balear Alfredo Montero, en este su segundo largometraje. Un film aterrador en todos los aspectos que, aunque esté hecha como una película del tipo cámara en mano, aporta elementos nuevos y muy interesantes, como por ejemplo el que esté rodada dentro de una cueva. Esto le da un aire claustrofóbico realmente perturbador, que te mantiene en tensión casi en toda su duración.

Asistimos de forma paulatina y muy inteligentemente explicada, a la degradación del género humano cuando se le pone en situaciones límite, no difiriendo mucho su comportamiento al de las más salvajes alimañas. Desprovistos de todo lo elemental, como pueden ser el alimento o el agua, los personajes de esta cinta reaccionan violentamente y ven a sus semejantes como sus más acérrimos enemigos, con la paradoja, de que todos estos despropósitos quedan grabados para la posteridad en una cámara de video, desgraciadamente se quedan sin cobertura en sus móviles.

Nos podemos imaginar las dificultades que comportó su filmación dentro de espacios tan reducidos. Los ángulos son imposibles y los movimientos, en ocasiones bruscos, de la cámara muy bien conseguidos. El contraste de la más profunda oscuridad con la claridad de los reflejos en las paredes y techos cuando les ilumina el flash, es realmente fascinante. Comentar que en su pre-producción, el director calculó unos 1.200 metros de pasillos transitables dentro de la cueva, usando hilo para no perderse dentro de ese laberinto rocoso. Tuvo que estudiar cada galería, cada pozo y cada roca centímetro a centímetro, anotando in situ, y ayudado por una linterna de espeleólogo, las particularidades de la misma. Resumiendo, primero fue la cueva, y luego el guión.

Cinco amigos, dos chicas y tres chicos, deciden realizar un viaje y van a parar a un bosque cercano a un escarpado acantilado. Después de algunas juergas deciden ir a bañarse. El descenso es dificultoso y en el camino encuentran una cueva. Deciden entrar a verla. Lo que pasa a partir de allí es el peor de los cuentos que nunca os han explicado. Ellos no saben que el horror está dentro de ellos mismos. Pronto se darán cuenta de ello.

Magnífica película de Alfredo Montero, la idea de la cual, y después de escuchar la explicación pertinente, surgió después de visionar The Blair Witch Project y The Descent, aunque poco tenga que ver con ellas. Comento esto porque rápidamente podemos asociarla gratuitamente a esas dos grandes cintas. Nada más lejos de la realidad. Su desarrollo a través de un excelente guión, obra también de Alfredo Montero, nos lleva a situaciones límite. Tras un principio, en el cual la relación entre los personajes y los diálogos parecen un poco forzados, sin frescura, la entrada de los cinco amigos a la cueva lo transforma todo. Se convierte entonces en algo turbador y angustioso, y en muchos momentos giraréis la cabeza para no ver lo que pasa en pantalla. Genial. Las interpretaciones son muy interesantes por su frescura. Destacaré a todos, y los nombraré uno a uno porque se lo merecen; Marcos Ortiz, Marta Castellote, Eva Garcia-Vacas, Jorge Páez y Xoel Fernández hacen unas actuaciones magníficas y no dudo, que en algunas escenas no les haría falta esforzarse mucho para conseguir reflejar en sus rostros el terror más alucinante. Destacar asimismo la fotografía, como no, también de Alfredo Montero por lo comentado anteriormente. Sombras y luces perfectamente ensambladas.

Una de las grandes sorpresas de este año, sin duda. Un film aterrador, que además tiene su broche de oro en un final apoteósico que os dejará muy mal cuerpo. Valdría la pena verla solo para apoyar el cine hecho en nuestro país, pero no le hace falta, se vale por ella misma para engrandecer un poco más el buen cine de género realizado en España.

Firma: Josep M. Luzán.