Quenottes review


Título original: Quenottes

Año: 2016

Duración: 13 min.

País: Francia

Director: Gil Pinheiro, Pascal Thiebaux

Guion: Pascal Thiebaux

Música: Mathieu Alvado

Fotografía: Serge Benassutti

Reparto: Lionel Abelanski, Frédérique Bel, Matthieu Clément-Lescop


Delirante e hilarante cuento.

El Ratoncito Pérez es el nombre que le ponemos en esta parte del mundo al mito infantil de que un hada, o lo que sea, trae bajo su brazo algún que otro regalito cuando se caen los dientes de leche. Esta historia se podría rodar de muchas maneras. Una podría ser: tiernos infantes revoloteando alborozados alrededor de la almohada, viendo cuan generoso ha sido el incombustible roedor. Lo que no podemos esperar es la manera en la que Gil Pinheiro y Pascal Thiebaux se ponen manos a la obra. Un cortometraje lleno de mala leche y fina o gruesa, según como se mire, ironía.


Habéis adivinado, no es aconsejable mostrarlo a los niños, lo cual eleva la insana curiosidad que adivinamos en vuestros malvados corazones. Los directores saben jugar perfectamente entre una distorsionada realidad y una animación que raya a gran altura, aunque con un solo personaje: un taimado ratón con pinta de zombi.

Tampoco esperéis una criatura súper-original. Es un vulgar roedor blanco, bastante feo, más veloz que Speedy González (¿Por qué a los ratones se les ponen apellidos latinos?) y mucho más inteligente y malvado que Micky Mouse. Nuestro héroe lleva de culo al pequeño universo formado por un padre y su hijo, los cuales acaban aterrorizados por tan pequeñajo engendro.

¿Qué pasa si en vez de encontrarnos con un pequeño ratón benevolente y generoso se presenta un psicópata neurótico obsesionado con su colección dental? Si falta un diente, simplemente debe ser reemplazado. Por cualquier medio...

Maravilloso en todos los sentidos, Quenottes es un cortometraje divertido, con un ritmo frenético, en cierto modo sorprendente y con un final de traca. Estamos ante un gran debut de los directores Gil Pinheiro y Pascal Thiebaux. El guion a cargo de éste último se encarga de transportarnos a un mundo de fantasía que, para variar, no lo forman criaturas edulcoradas y con rostro angelical, al contrario.

Punto y aparte merece la animación del animalito de marras. A su cargo Ghayth Chegaar y Mickael Coedel como director de animación, que cuenta en su historial con la participación en films como Star Wars: El Despertar de la FuerzaTransformers: La Era de la Extinción e Iron Man 2. Creo que todo está dicho.


En el apartado interpretativo acabamos rápido. Lionel Abelanski interpreta a un histérico padre. A Matthieu Clément-Lescop le toca interpretar al disperso niño. El papel estrella es para Frédérique Bel. Adivinad el motivo.

Para finalizar alabarlo de principio a fin. Disfrutaréis de un producto muy bien acabado y que reúne todos los alicientes para pasar un buen rato. Esto que parece tan simple seguro que ha costado mucho trabajo.

Firma: Josep M. Luzán.
@Josep_Luzan