Strangled review


Título original: A Martfüi Rém

Año: 2017

Duración: 118 min.

País: Hungría

Director: Árpád Sopsits

Guion: Árpád Sopsits

Música: Márk Moldvai

Fotografía: Gábor Szabó

Reparto: Károly Hajduk, Gábor Jászberényi, Zsolt Anger, Péter Bárnai, Zsolt Trill, Zsófia Szamosi


Atroces asesinatos en un mundo frío.

Cuando nos disponemos a ver un film que trata sobre serial killers nuestra mente ya dibuja una historia turbia y oscura, con los aditivos conocidos de sangre, gritos y algo de gore. Estamos, para variar, ante una nueva visión de este tipo de films. Tiene la particularidad que está ambientada en la Hungría socialista de los años sesenta. La carga política está bien presente, ya que “el aparato” gubernamental no estaba para muchos romances y tan pronto estabas arriba como picando piedra. Ese terror, en el sentido más social de la palabra, hacía que la eficacia, en este caso policial, se forzara hasta límites insospechados, tanto que no se dudaba en cargar sobre las espaldas del primero que pasara por allí todo tipo de crímenes.


Tampoco hay que irse a los países del Este, en nuestro suelo patrio, en épocas no tan remotas, la pretendida y legendaria eficacia policial iba por el mismo camino y, supongo que estaréis de acuerdo conmigo, que de socialista no tenía nada.

Pero vamos a hablar de cine, que de eso se trata. Strangled es una gran película que sabe dibujar todo lo antedicho con un gran ritmo que para nada cansa al espectador. Los personajes están muy bien dibujados, mostrándonos una sociedad muy encorsetada por las circunstancias. Tampoco abusa de las escenas escabrosas, que también las hay. Nos las planta como una secuencia más, sin encarnizarse en los detalles, cosa que a los amantes de lo más sangriento los puedes tirar para atrás.

Una serie de atroces asesinatos asolan la pequeña ciudad de Martfü. El causante de todo ello es un asesino que viola y mata a mujeres jóvenes. Un detective se hace cargo del caso, teniendo que soportar la presión por parte del fiscal que quiere a toda costa que el caso se resuelva. Las prisas son malas consejeras y a pesar de las evidencias de tomar un camino equivocado, la investigación se atasca a causa de una tupida red de intrincadas conspiraciones.

Tenemos que destacar el gran guion cuya autoría recae en el mismo Árpád Sopsits. La soltura con que nos muestra una historia algo complicada, la hace muy comprensible y entretenida.

Como punto negativo, la algo floja representación de unas atrocidades que se quedan solo en lo simbólico. Por otra parte, tampoco juega a su favor la excesiva explicación de los motivos del asesino.


En las interpretaciones nos encontramos con un gran Károly Hajduk en el papel de asesino en serie. A Gábor Jászberényi le toca bailar con la más fea. Zsolt Anger es el policía bueno. Péter Bárnai es un agresivo fiscal. Zsolt Trill es el policía malo y en la parte femenina tenemos a Zsófia Szamosi.

Para finalizar decir que es una cinta altamente recomendable a todos los amantes del terror. Los que busquen algo más de tipo social también lo encontraran.

Firma: Josep M. Luzán.
@Josep_Luzan