Entrevista a Evan Spiliotopoulos, director y guionista de Ruega por Nosotros


¿Cómo llegaste al proyecto?

Cuando tenía 13 años leí Shrine, la novela de James Herbert. Me encantó y como ya tenía en la cabeza dedicarme a la escritura de guiones, pensé que Shrine debería convertirse en una película.

Según fui ascendiendo en el negocio de las películas, iba por los estudios con el libro y les decía “¿Qué os parece si compráis los derechos de este libro para mí?”. Y al final Screem Gems vino con una idea loca: que además de adaptarlo, lo dirigiera. La verdad es que no tenía muchas ganas de dirigir porque no quería complicarme la vida de esa manera, pero mi equipo me animó: "Venga, deberías hacerlo, es una carrera nueva para ti”. Así que contesté con rapidez al estudio, antes de que se arrepintieran de la propuesta, y aquí estamos.


Para adaptar la novela a película, ¿Cuáles fueron los mayores cambios que hiciste?

En la novela, la protagonista, Alice, tiene madre mientras en la película es huérfana y vive con su tío, el padre Hagan. Trabajé mucho en el personaje de Alice para que los espectadores se preocuparan por ella, por lo que podría pasarle.

En el tercer acto del libro, los personajes principales no intervenían directamente para detener la amenaza, sino que se quedaban a un lado en la lucha entre el bien y el mal. Y yo quería darle fuerza a los personajes. Por ejemplo, Gerry Fenn, el personaje de Jeffrey Dean Morgan, hace un viaje de redención, al principio no tiene mucha moralidad y termina cambiando. El arco de este personaje se parece mucho al de Kirk Douglas en la película El Gran Carnaval de Billy Wilder.


¿Trabajasteis mucho Jeffrey Dean Morgan y tú a la hora de construir su personaje?

Voy a contarte una historia muy loca que me pasó con Jeffrey. Cuando estaba preparando la película vivía en Studio City. Nuestra primera reunión fue virtual y al mover el ordenador, Jeffrey vió mi casa y casi le dió un ataque al corazón: ¡Yo había comprado la casa en la que él vivió diez años antes!

Quería a Jeffrey por lo que he contado antes de El Gran Carnaval, Kirk Douglas es el protagonista y es un tramposo, un mentiroso pero, a pesar de eso, era Kirk Douglas y el público se lo perdonaba todo. Por eso necesitaba a Jeffrey, aunque su personaje es amoral la audiencia se va a preocupar por él ya que resulta encantador y sexy a la vez. El tipo malo al que queremos verle redimirse. Mira lo que pasa con The Walking Dead, mata a los protagonistas con un bate y aun así es el personaje favorito de la audiencia, o El Comediante de Watchmen que ¡es un psicópata!

Por eso elegí a Jeffrey, necesitaba que interpretara a un capullo, pero que fuera un capullo encantador.


Háblame de Criket Brown, para mí el descubrimiento de Ruega por Nosotros.

¿Te quieres creer que es su primera interpretación en el cine? Había hecho cortometrajes pero nunca participó en un largo. Yo estaba muy preocupado por el casting de Alice porque necesitaba a una persona joven que pudiera convertirse en el corazón y alma de la historia.

Hicimos pruebas a una gran cantidad de actrices pero seleccioné a Criket porque fue la mejor, era la que más se acercaba a como me imaginaba su personaje y porque tiene esta especie de “aura”. Criket tenía carrera teatral y posee una gran voz interior, por eso cuando sabía lo que debía hacer, lo expresaba externamente: cómo hacer las cosas más grandes, cómo conectar con la lente de la cámara como si fuera la audiencia de un teatro.


Ahora que has probado a ser director, que prefieres ¿Escribir guiones o dirigir?

¡Escribir! (risas) La verdad es que para ser mi primera experiencia como director, he tenido la suerte de escoger un director de fotografía, un editor, etc… un equipo de gente maravillosa que me ha ayudado. Pero una cosa es escribir un guion y otra hablar con todos los técnicos para buscar los mejores caminos.


¿Te gustaría volver a dirigir?

¡Sí, pero no durante una pandemia! (risas) Me encantaría volver a dirigir porque tengo algunos guiones que me encantaría rodar. Conozco a muchos directores que, al terminar una película ya tienen contratada otra, pero yo voy a esperar a que se estrene Ruega Por Nosotros y que me contraten porque les ha gustado.


¿Cuáles son tus nuevos proyectos?

Snake Eyes, una película de G.I. Joe que se estrenará en octubre. Con Henry Golding, trata sobre el origen de este Ninja que nunca habla.


¿Qué tal Sam Raimi como productor?

Jamás podría haber imaginado un mejor productor, mentor y profesor. Ya era fan de Sam Raimi, como cualquier fan del género de terror, pero lo más increíble es lo gran persona que es. Al conocerle te dices “este es el tipo que ha dirigido Posesión Infernal o Arrástrame al infierno”. Se involucró a fondo en el proceso de la preproducción y me enseñó acerca del proceso de efectos especiales digitales y prácticos; por ejemplo, la aparición en la película es un 70% práctico ya que teníamos a la actriz que la interpretaba con el resto de los protagonistas. También me ayudó a diseñar el personaje de Mary. Estuvo conmigo durante la primera semana de rodaje y cuando terminé de rodar él estaba en Londres y hablábamos por videoconferencia para el montaje.

Así que Sam Raimi estuvo conmigo en todos los pasos de Ruega Por Nosotros. Me encanta ver que en el póster de la película se puede leer “producida por Sam Raimi” y “dirigida por Evan Spiliotopoulos”.


¿Película de terror favorita?

El Exorcista, sé que parece una respuesta demasiado fácil pero la vi a una edad perfecta para que me asustase, adoré las situaciones y el scope de la película. Captura a la perfección el espíritu de 1973 y es una gran película.