The Beach House review


Una joven pareja va a pasar unos días en la casa de la playa del padre del chico. Al poco de estar allí unos viejos amigos de su padre se presentan en la casa con la misma intención, algo que los chicos no sabían. Aunque al principio, pese a lo incómodo de la situación, parece que hagan buenas migas no tardarán en percartarse de que algo malo les ocurre.

Título original: The Beach House

Año: 2019

Duración: 87 min.

País: Estados Unidos

Director: Jeffrey A. Brown

Guion: Jeffrey A. Brown

Música: Roly Porter

Fotografía: Owen Levelle

Reparto: Liana Liberato, Noah Le Gros, Jake Weber, Maryann Nagel


Una nueva muestra del terror indie.

El género del terror en pequeño formato no es, en absoluto, una rara avis. Cada año, y ya os confirmo que esta tendencia va a ir a más, aparecen producciones muy pequeñas, con muy pocos miembros del reparto y muy pocas localizaciones. Y no digo esto de manera peyorativa, en lo absoluto, hay joyas como The Invitation (Karyn Kusama, 2015), It Follows (David Robert Mitchell, 2014), Coherence (James Ward Byrkit, 2013) o À l'intérieur (Alexandre Bustillo, Julien Maury, 2007) que serían tal vez, los ejemplos más exitosos que me vienen a la cabeza pero una pequeña muestra que demuestra que ser una producción pequeña no está peleada, en lo absoluto, con la calidad final de la cinta. ¿Es The Beach House otra aportación mayúscula o se queda a medio camino?


Una joven pareja va a pasar unos días en la casa de la playa del padre del chico. Al poco de estar allí unos viejos amigos de su padre se presentan en la casa con la misma intención, algo que los chicos no sabían. Aunque al principio, pese a lo incómodo de la situación, parece que hagan buenas migas no tardarán en percartarse de que algo malo les ocurre.

En ocasiones los problemas y fallas se pueden convertir en virtudes si se sabe como manejarlos, desgraciadamente no es el caso de The Beach House, que alarga la introducción hasta el hastío y cuando (por fín) empieza una especie de argumento no le quedan más de veinte minutos a la película. El largo comienzo, sumados a un ritmo soporífero, personajes poco interesantes y que cuando se pone las pilas tampoco es que sea gran cosa hacen que The Beach House se haga más larga que un día sin pan pese a no durar ni 90 minutos. No es que no ocurra nada, se nota que se van colocando pequeños datos y pistas para que en el desenlace todo quede algo más atado, pero no justifica un largometraje con el poco argumento que tiene.


Debuta en el guion y la dirección Jeffrey A. Brown en un largometraje pese a tener una prolífica carrera en departamentos de preproducción de grandes títulos y ahora le llega su turno. Siendo un proyecto totalmente suyo es justo que los mayores pros y contras se le achaquen a él. Se le notan pocas ideas al querer contar esta historia, tal vez en un formato distinto, tal vez un cortometraje que roce los treinta minutos hubiera sido algo más agradecido, pues como decía anteriormente, no da para hora y media ni en el mejor de los sueños. Un reparto escasísimo, tan solo cuatro personajes en toda la película, que no sería un problema si fueran interesantes, pero no es el caso. Protagonizan Liana Liberato (Haunt) y Noah Le Gros (Depraved) como la joven pareja, lo cierto es que mucha química entre ellos no es que haya, principalmente porque Le Gros se pasa con la misma cara toda la película. Toda la cinta mirando a Jake Weber y preguntándome dónde lo había visto antes, después de una rápida busqueda era en Amanecer de los Muertos (Zack Snyder, 2004), su papel no es que sea intrascendente pero, como el resto de la película, tiene escaso interés y nulo ritmo.

El cine de terror indie tiene mucho mejores aportaciones donde demuestra que aunque se disponga de pocos medios se pueden crear auténticas obras maestras, en el caso de The Beach House es un intento fallido que pasará por tu retina tan rápido como la olvidarás.

Firma: Oriol Hernández.
@Oriol_TW

🎬 VOD