Nocturna Madrid rendirá homenaje a Alex Proyas en el 25 aniversario de su película El Cuervo


La película El cuervo (The Crow), que cumple 25 años como una de las cintas de género más destacadas de la historia del cine, protagoniza el cartel del VII Festival Internacional de Cine Fantástico Nocturna Madrid, en un homenaje al film y a su director, Alex Proyas, invitado de honor en esta edición que se celebrará entre el 22 y el 26 de octubre.

El cuervo es una película indispensable que sumerge al espectador en un universo propio, con la muerte como tránsito, no como final. Es una cinta llena de dolor y desesperación que trasciende la mera violencia, con una banda sonora que hizo historia y una estética que marcó una época y a toda una generación para persistir en el tiempo, algo que la avala como una obra imprescindible que debía ser homenajeada en Nocturna Madrid”, explica el director del Festival, Sergio Molina.

Su estética oscura, su diseño artístico, inspirado en la cultura del videoclip y en el cómic underground homónimo de James O’Barr, su neorromanticismo, el post punk y una banda sonora creada por Graeme Revell encabezada por temas inéditos como “Burn” de The Cure, la versión del “Dead Souls” de Joy Division de Nine Inch Nails, “The Badge” de Pantera, “Ghostrider” de Rollins Band o “Big Empty” de Stone Temple Pilots, entre otras tantas, hicieron que público y crítica enaltecieran El cuervo en su estreno en 1994, al igual que sucedió con otras obras de éxito del género fantástico como Batman de Tim Burton o Blade Runner de Ridley Scott, contribuyendo además a popularizar el movimiento cultural gótico.

Su director, Alex Proyas viajará desde Australia para recibir el Premio Maestro del Fantástico en Nocturna Madrid y participar en diversas actividades previstas como el encuentro con el público tras el pase especial aniversario de la película, que cuenta con la colaboración de su distribuidora en España, Inopia Films. “Me hace muy feliz poder asistir a Nocturna Madrid, un prestigioso festival con un público muy fiel con el que espero disfrutar mucho”, afirma Proyas.


Nacido en Egipto, Alex Proyas comenzó dirigiendo anuncios y videos musicales para bandas y artistas como “Crowded House”, “INXS”, Mike Oldfield, “Fleetwood Mac” o Joe Jackson, entre otros, y ha conseguido formar un núcleo de fans por todo el mundo, admiradores de su talento como “ilustrador de mundos”, haciendo enfática aquella frase con la que se denominaba también a Ridley Scott.

De su dirección han surgido películas como Spirits of the Air, Gremlins of the Clouds (1989), una producción que junto con sus afamados trabajos en formato corto le permitió dar el salto a los Estados Unidos; Dark City (1998), considerada como una de las cimas de la ciencia ficción en el cine; Días de garaje (Garage Days, 2002); Yo, robot (2004), toda una creación de una sociedad futura; Señales del futuro (Knowing, 2009) o Dioses de Egipto (Gods of Egypt, 2016). “En definitiva, mundos impresionantes y fabricados de un director visionario que permite tener cerca a su público y que hoy es considerado como uno de los grandes talentos del género fantástico”, explica Sergio Molina.

La película El cuervo dirigida por Proyas, donde “nada es trivial” e incluso aparece el propio O’Barr robando una televisión tras la explosión en una tienda, está llena de reminiscencias poéticas a Edgar Allan Poe (el protagonista cita el poema “El cuervo”) y se dice que el característico maquillaje del protagonista está inspirado en una marioneta que O’Barr vio en un teatro londinense. Cuenta la historia de un músico, Eric Draven, que regresa de la muerte acompañado de su alter ego, un cuervo, para hacer justicia con aquellos que, a unos días de su boda, le asesinan violentamente a él y a su novia Shelley, a la cual también violan. Su alma no podrá descansar tranquila hasta que la venganza se haya completado, y será el amor el causante de su “vuelta a la vida”. Una historia sobre las injusticias, la eterna lucha entre el bien y el mal y un amor que puede ir más allá de la muerte, usando la ciencia ficción como fondo. “Los edificios arden, las personas mueren, pero el amor verdadero es para siempre”, dice en el film el personaje de Sarah, la niña, a modo de conclusión narrativa.

Una película legendaria con una innegable influencia en el cine de superhéroes

La cinta es también conocida por el gran público por la leyenda que la envuelve debido a la muerte accidental de su protagonista durante el rodaje, Brandon Lee -el hijo del maestro de las artes marciales Bruce Lee, también fallecido en extrañas circunstancias durante la película Juego con la muerte (Game of Death, Robert Clouse, 1978)- a causa de un error técnico y el impacto de una bala a la que supuestamente se le retiraba la pólvora dentro de una Magnun calibre 44 empuñada por el personaje de Funboy (Michael Massee). En la ficción, suponía la muerte de Draven, que después regresaría de entre los muertos, pero derivó en la muerte real de Lee, el actor que encarnaba al personaje. El metraje de la fatídica toma fue utilizado como evidencia en la investigación policial y después fue quemado personalmente por Alex Proyas, quien dedicó la película al actor y a su novia, Eliza Hutton, con quien se iba a casar en 17 días. Tanto ella como la madre de Brandon Lee fueron quienes animaron a Proyas a terminar el film. De hecho, algunas escenas tuvieron que completarse con complejas digitalizaciones, miniaturas y modelos mecánicos. El cuervo fue rodada haciendo frente también al accidente de tráfico de uno de los publicistas de la película, un miembro del equipo se electrocutó al preparar los decorados y una tormenta destruyó parte de los decorados y dejó enferma a la mitad del staff.

Con un presupuesto de 23 millones de dólares, la película llegó a conseguir más de 94 en la taquilla de todo el mundo y acabaría por ser inmortalizada gracias también a emblemáticas escenas como el salvaje tiroteo en la sala del jefe de la banda de delincuentes, los flash backs de la historia de amor de Draven y Shelley o la destrucción de la guitarra del protagonista sobre el tejado. “El cuervo es una de las historias de culto más influyentes de las dos últimas décadas. El héroe o antihéroe se ha convertido en un icono y es innegable su influencia en el cine posterior de superhéroes”, admite el director de Nocturna Madrid.

Durante años se ha pretendido hacer un remake de El cuervo a pesar de las peticiones de Proyas para evitarlo, que terminó la película por Brandon Lee, “por su maravilloso trabajo como actor y como hombre con una humanidad emocionante”, expresa. “De no ser por él nunca habrías oído hablar de ese cómic underground y conmovedor. Es la película de Brandon. Creo que es un caso especial en el que Hollywood debería dejarla como el testamento. Es verdad que se han hecho secuelas y series, pero la idea de rehacer la historia y al personaje me parece equivocada. Por favor, dejen que siga siendo la película de Brandon”. A un mes del rodaje del reboot de El cuervo que iba a dirigir Corin Hardy, su protagonista, Jason Momoa, abandonaba el set tras la negativas de miles de fans indignados por el rodaje de este film, así como de James O´Barr y de Proyas. “No estoy preparado para darle a ésta película lo que se merece, que es respeto y amor”, adujo el actor.

La mejor adaptación de un cómic en una película llena de simbología imperecedera

Más allá de la atmósfera sofocante y lluviosa de El cuervo, fotografiada por Dariusz Wolski en el futuro hipotético de una ciudad muerta con madrugadas desesperanzadoras, que realmente es Detroit y que parece recordar a Gotham City -como decía Todd MacCarthy en la revista “Variety”-, el estilo visual de El cuervo ha sido considerada como “la mejor adaptación de un cómic jamás antes vista”, según señaló el desaparecido crítico cinematográfico Roger Ebert.

A principios de los 80, el veinteañero guionista e ilustrador norteamericano James O’Barr dibujaba manuales de combate para los marines americanos, cuando decidió empezar un cómic llamado The Crow. “Una manera de hacer catarsis”, según confesó en una entrevista, corroído “por la violencia y sed de justicia que le hubiera gustado usar para apaciguar su rabia” tras la muerte de su prometida, fallecida al ser atropellada por un conductor borracho.

O’Barr también se inspiró para escribir la historia de El cuervo en un caso sobre una pareja asesinada a la que le robaron un anillo de compromiso. A España llegó la primera edición del cómic de El cuervo como serie limitada de cuatro números en grapa de la mano de Glenat, así como los pin ups con textos de Rimbaud o letras de canciones de The Cure (“The Hanging Garden”) o Joy Division (“Atmosphere”, “Atrocity Exhibition”), homenajes estilísticos a autores como Will Eisner. El éxito del personaje, todo un icono del gothic-punk, propició la aparición de diversas continuaciones de la serie al amparo del sello Kitchen Sink Press: The Crow: Dead Time; The Crow: Flesh and Blood;The Crow: Wild Justice y The Crow: Waking Nightmares. Lo mismo ocurrió con la película y sus sagas posteriores.

Actualmente, con más de 750.000 ejemplares vendidos, The Crow de James O´Barr sigue ostentando el título de ser la novela gráfica independiente más vendida de la historia del cómic. En 2012 apareció una nueva revisión en la que el autor añadió 30 páginas adicionales distribuidas a lo largo de la obra, además de un nuevo final, un interludio autobiográfico (“Navidad en agosto”) y la reelaboración de algunas viñetas, así como un emotivo recuerdo al actor protagonista de la película, a quien dedica el libro.

El emblemático pájaro negro portador de las almas que deben pasar al otro mundo, sostiene una entrada del festival en su pico y protagoniza el cartel de la VII edición de Nocturna Madrid que se celebrará entre el 22 y el 26 de octubre, en un guiño también a Alien de Ridley Scott, en su 40 aniversario. Junto a esta película mítica de Proyas, Nocturna Madrid anunciará próximamente una treintena de cintas innovadoras del fantástico, recordando que, a pesar de todo, “nunca llueve eternamente”.

Sobre Nocturna Madrid: un festival que trasciende la gran pantalla

El VII Festival Internacional de Cine Fantástico Nocturna Madrid, que se celebrará entre el 22 y el 26 de octubre en Cinesa Proyecciones, la Sala Berlanga de la Fundación SGAE y el Forum FNAC Callao, es todo un acontecimiento para los fieles seguidores del cine de género en Madrid durante la semana de Halloween. Impulsado por La Cruzada Entertainment (productora de títulos como La Herencia Valdemar, 2009) aborda su VII edición posicionando a Madrid en el circuito de los grandes festivales de género.

Bajo la dirección de Sergio Molina, su programación está compuesta por las Secciones Dark Visions, Panorama y Nocturna Classics, donde se ofrece las propuestas más arriesgadas y originales del género internacional así como la oportunidad de ver en pantalla grande las joyas del cine fantástico de todos los tiempos. Además, está privilegiada por una Sección Oficial en la que se han realizado premières y estrenos mundiales de género, incluso simultáneos con Londres, como el caso de Al filo del mañana (Vive, muere, repite); Feliz día de tu muerte; Silent Hill: Revelation 3D; Vampyres, Expediente Warren 1 y 2: El caso Enfield; Revenge; Dhogs, Mandy o La noche de Halloween, entre otras.

Por Nocturna Madrid han pasado figuras del cine internacional como Robert Englund, Tobe Hooper, Dario Argento, Joe Dante, John Landis, Mik Garris, Neil Marshal, Don Mancini, Caroline Munro, Don Coscarelli,  Natalie Dormer, Chicho Ibáñez Serrador, Álex de la Iglesia, Jaume Balagueró, etc., y ha sabido reunir en estos últimos años a un público fiel seguidor del género que alcanza los 15.000 espectadores durante apenas 5 días.

Pero además, uno de sus platos fuertes es la difusión del Fantástico español o Fantaterror, con la presencia de cineastas como el recientemente fallecido Jordi Grau, y el hecho de ser cantera de nuevos cineastas del género a través de su nutrida y selecta sección de cortometrajes. No en vano Ángel Gómez Hernández acaba de ser apadrinado por Sam Raimi para adaptar a la gran pantalla su cortometraje Behind, premiado en Nocturna Madrid.

Un festival que trasciende la gran pantalla gracias también a sus ciclos, mesas redondas, talleres, encuentros con el público, masterclass y eventos festivos en sus distintas sedes, así como una serie de atractivas actividades paralelas que reúnen a gran número de público.