Crónica Festival terrorMolins 2018 día 8


Visto lo visto en días anteriores, hoy podríamos calificar esta jornada como tranquila. Y decimos podríamos porque la realidad dista mucho de ser así. A veces la calidad prima más que la cantidad y los frenéticos films que componen la parrilla hacen, como si dijéramos, un efecto multiplicador.


Teatro de la Peni
A primera hora de la tarde nos toca degustar uno de los films que, en nuestra opinión, marcó un antes y un después en el género de terror. Estamos hablando de Carrie de Brian de Palma. Está basada en la novela con el mismo nombre de Stephen King en su primera novela. El guion corre a cargo de Lawrence D. Cohen. ¿Qué se puede esperar del binomio King-De Palma?, pues ante todo bajar a las profundidades del terror de la mano del escritor estadounidense, eso sí, adornado por el preciosismo narrativo de De Palma. Una explosiva combinación que nos regaló esta obra que todo sea dicho, no dejó indiferente a nadie. Brian de Palma realizó la cinta justo después de Hermanas, El fantasma del Paraíso, Fascinación y antes de Vestida para Matar e Impacto. Este periodo dentro de la filmografía del director es conocido como “el periodo rojo” y está fuertemente marcado por el estilo del Maestro del Suspense Alfred Hitchcock. Así, podemos indicar que De Palma es quien mejor ha homenajeado el cine del simpar realizador inglés y en Carrie también podemos observar esta influencia. Carrie es un retrato duro y cruel de la etapa adolescente y de la, a simple vista, perfecta e impecable familia norteamericana. Hoy en día es algo normal mostrar este tipo de abusos pero en los 70 poner el dedo en la llaga era novedoso y arriesgado. En las interpretaciones unos desconocidos y desconocidas, por aquel entonces Sissy Spacek (En la Habitación, Quiero Ser Libre), Amy Irving (Traffic, La Furia), John Travolta (Pulp Fiction, Fiebre del Sábado Noche), Nancy Allen (Impacto, RoboCop), William Katt (El Gran Héroe Americano; House, una Casa Alucinante) secundados por veteranos del calibre de Piper Laurie (El Buscavidas). Carrie White es una adolescente marginada por la influencia perniciosa de su madre: una fanática religiosa, con una fuerte obsesión por hacer sus propias interpretaciones de la Biblia. Estas influencias sobre Carrie la convierten en el blanco de burlas del colegio, ya que sus compañeros no comprenden su timidez e introversión.

Dejamos el pasado atrás y nos adentramos en la más candente actualidad, dentro ya de la Sección Oficial a Competición, de la mano de Lords of Chaos de Jonas Åkerlund, estando ayudado en el guion por Dennis Magnusson. Está basada en la novela del mismo nombre de Michale Moynihan y Didrik Søderlind. Se da la circunstancia que a principios de los años ochenta el Sr. Åkerlund co-fundó la banda de metal sueca Bathory para luego dirigirse a Estados Unidos e iniciar una carrera de director de video clips. Destacan sus trabajos para Rammstein, Prodigy, Lady Gaga y Madonna. Como veis una gran antesala para decidirse a rodar su primer largometraje Lord of Chaos. Los protagonistas, Euronymous y Dead tienen el siguiente mensaje en el contestador automático: “No podemos atender el teléfono en ese momento porque estamos muy ocupados sacrificando niños”, con lo que ya os vais haciendo a la idea de por dónde van los tiros. Advertencia: los espectadores tienen que ser capaces de manejar las imágenes de cabezas de cerdo amputadas, torturas de gatos y nazismo de andar por casa. Åkerlund demuestra una gran habilidad para sacar todo el jugo obteniendo unas grandes interpretaciones de un elenco joven. Lo encabeza Rory Culkin (Señales, Scream 4), seguido por Jack Kilmer (Dos Buenos Tipos), Emory Cohen (The OA) y Jon Øigarden. Euronymous es un niño esbelto y arrogante con ojos azul cristal que jura y perjura que es la encarnación de lo malvado. En la década de los noventa, con su grupo Mayhem, Euronymous da forma a la escena del black metal noruego, dando como resultado muy violento.

Como broche de oro de la edición de este año, y en la gala de clausura, Jack Taylor recibe el Premio Honorífico. A continuación, asistimos al documental Jack Taylor Testigo del Fantástico. Estamos ante un imprescindible documental que repasa la trayectoria del mítico actor Jack Taylor. Escrito y dirigido por Diego López (Los Perversos Rostros de Victor Israel, Herederos de la Bestia), el documental recoge un impagable testimonio en primera persona acerca de una vida consagrada a la interpretación de género.

Como guinda del pastel tenemos la celebérrima, a pesar de su estreno en 2018, Mandy de Panos Cosmatos. Colaborando en el excelente guion tenemos a Aaron Stewart-Ahn. Lo que puso al director italo-canadiense en boca de todo el mundo hace unos años fue la extraña y a su vez atrayente Beyond the Black Rainbow, que estaba cargada de referencias al cine de género, un poco de Argento, una pizca de Carpenter y sobretodo mucha cosecha propia. Cosmatos supo marcar la diferencia con un film con sello propio y aunque su ópera prima pecaba de tener un guion algo confuso y un ritmo algo pesado, se abrió hueco dentro del corazón de los amantes del género. Parece que Panos Cosmatos ha aprendido de sus errores pasados y con Mandy corrige los defectos antes mencionados en su anterior cinta. Eso sí, sin perder su toque onírico casi salido de la mente de un Cenobita. Por otra parte, la primera parte sigue pecando de tener un ritmo algo pesado, pero esto se corrige hacia mitad de la película donde el director decide poner el turbo y no afloja el acelerador hasta el final. En cuanto a las actuaciones, tenemos a un Nicolas Cage extraordinario, estamos acostumbrados a que en cualquier film donde aparece tenga su “momento Cage” pero es que en Mandy este momento está elevado a su máxima potencia. Cualquier fan del actor californiano disfrutará de su apabullante actuación. Destacar también el intenso papel de Andrea Riseborough como Mandy, la cual desprende un halo único. Tan solo con su mirada hipnotiza tanto a Cage, como al propio público. Red y Mandy viven apartados de la civilización, su amor es único y verdadero. Viviendo en mitad de la nada, rodeados del frondoso bosque como vecino, una noche reciben una inesperada visita. Son Asaltados por una secta que acaba arrebatando la vida de Mandy delante de un desesperado Red, que solo puede observar la horrible situación. La única motivación en la vida de Red es encontrar a los asesinos del amor de su vida y liquidarlos sin compasión.


Sala Gótica
Toca asistir a la última sesión en esta sala, en colaboración con Brigadoon, la italiana Rabbia Furiosa: Er Canaro de Sergio Stivaletti. En el guion: Antonio Lusci, Sergio Stivaletti y Antonio Tentori. Podemos decir que la idea del cine de Stivaletti es libre, radical y, en cierto modo, anacrónica, pero por esta razón conserva su poderoso encanto: está completamente libre de esa "esclavitud de la forma" que ahora consideramos un requisito ineludible del cine contemporáneo. El cine de Sergio Stivaletti tiene un sabor de otros tiempos, y si buscas movimientos perfectamente estudiados, un meticuloso diseño de escenario, un montaje frenético, o incluso un sonido limpio, este no es el tipo de película adecuado para tu paladar. Por otro lado, si aún tienes en mente el largo y glorioso camino del cine italiano, que desde los años 70 se ha extendido hasta principios de los 90, entonces Rabbia Furiosa: Er Canaro casi podrá conmoverte por su poética y espontaneidad. Estamos ante un delirio creativo, apreciable precisamente por su naturaleza onírica y caricatural, que se acentúa deliberadamente con opciones no menos atrevidas que el departamento de vestuario. Para enriquecer el color general, está la maravillosa banda sonora de Maurizio Abeni, que ofrece un tema evocador que recuerda al Morricone más de western, que Stivaletti nos abofetea con la violencia casi invasiva en todo el video. En las interpretaciones tenemos a Riccardo De Filippis (Roma Criminal), Marco Felli, Gianni Franco (Crímenes en Portada), Eleonora Gentileschi y Romuald Andrzej Klos (La Pasión de Cristo, Roma). Fabio, un delincuente de poca monta, sufre las humillaciones y abusos de su entorno. Hasta que, un día, decide vengarse de sus acosadores.

Cerrando la edición de este año y en colaboración con El Buque Maldito, tenemos Sexo Sangriento de Manuel Esteba. En el guion, aparte de Manuel Esteba, nos encontramos con Xavier Flores. Dentro de la filmografía del director tenemos títulos tan sugerentes como El E.T.E. y el Oto, Porno: Situación Límite y Agáchate que Disparan, como veis todo un viaje alucinante a través del cine patrio, eso sí, a coste mínimo, con lo cual aseguraban una cierta rentabilidad que garantizaba la continuidad de este cineasta al que el mismísimo Spielberg dio su beneplácito para el rodaje de la primera de las antes mencionadas. Sexo Sangriento se clasificó “S” en su momento, la cinta enlaza sexo, asesinatos y psicofonías a ritmo de Goblin y su mítico tema L’Alba dei morti viventi. Composición que la banda italiana había confeccionado para el film Zombi El Regreso de los Muertos Vivientes (George A. Romero, 1978) y que Manuel Esteba capturó y utilizó eficazmente. Las interpretaciones tampoco creáis que son tan cutres. Para empezar tenemos a la ya un poco decadente Mirta Miller (Cría Cuervos y La Chica del Molino Rojo), Ovidi Montllor (El Pico, La Fuga de Segovia), Diana Conca (El Amante Bilingüe) y Vicky Palma. Tres mujeres, entre las que se encuentra una parapsicóloga, se trasladan hasta un pueblo totalmente fantasma y abandonado para poder llevar a cabo una serie de experimentos. Necesitan intimidad y que nadie les moleste, por eso eligen tal misterioso lugar. Pero allí conocerán a una pintora que vive con su hijo, un muchacho muy poco normal...

No os creáis que hemos acabado. Nos queda una traca final que hará retumbar todo Molins de Rei.