Crónica Festival de Sitges 2017 día 2


Viernes 6 de Octubre

Toca madrugar, el segundo día aparece esplendoroso ante nuestras narices. Con las pilas cargadas nos disponemos a disfrutar de una jornada que sobre el papel es para quitarse el sombrero. Esperamos que esta premisa se ajuste lo más posible a la realidad.

Vamos por materia. Ante nosotros la producción canadiense The Heretics en cuya dirección tenemos a Chad Archibald. El guion va a cargo de Jayme Laforest. La colaboración entre ambos cuenta con el precedente de la impactante Bite de 2014, lo que dice bastante a su favor. En esta producción parece que el Sr. Archibald ha crecido profesionalmente, exprimiendo al máximo las posibilidades de un presupuesto ajustado. Podemos decir que uno de los puntos fuertes de la cinta son unos portentosos efectos de maquillaje junto a un conseguido diseño de producción. Entre los actores nos encontramos con Nina Kiri (Let Her Out) y Ry Barrett (The Demolisher y Save Yourself). Un extraño y oscuro culto secuestra a una joven muchacha y todos los miembros se sacrifican bajo la luz de la luna de la langosta. La joven despertará a la mañana siguiente empapada en sangre y rodeada de cadáveres, pero sana y salva, o eso es lo que ella cree. Años más tarde, cuando de nuevo la luna de la langosta ilumina el oscuro cielo nocturno, la joven es de nuevo capturada por un miembro vivo del culto. La llevara a una remota cabaña donde le revelara que un demonio ha crecido oculto en su interior.

Nos trasladamos a la un poco lejana, cinematográficamente hablando, Turquía para ver Housewife, la nueva de Can Evrenol, que cuenta con la colaboración de Cem Özüduru (Baskin) en el guion. En 2015 ya tuvimos ocasión de disfrutar con el pase de Baskin y comprobar el gran éxito de público que cosechó. Esto hace que Housewife haya despertado una gran expectación, y, no os preocupéis, el terror y el gore están garantizados. La violencia extrema, el sexo más insano y unas imágenes de lo más sangrientas parece que se han convertido en marca de la casa para regocijo de los hoolingans de este tipo de cintas. En el reparto una extraña mezcla de nacionalidades. Empezamos por el turco Ali Aksöz, seguimos con la francesa Clémentine Poidatz y acabamos con el japonés, aunque nacido en Dinamarca, David Sakurai (Dark Samurai). La infancia de Holly ha sido una auténtica pesadilla. A los siete años vio cómo su madre asesinaba a su hermana y a su padre. Veinte años después los dolorosos recuerdos han regresado a través de sus sueños. Una inesperada reunión con un viejo amigo complicará aún más la situación. Un extraño culto ha puesto su punto de mira en ella. Ahora sus peores pesadillas se harán realidad.

Seguimos con la coproducción Reino Unido-Irlanda The Killing of a Sacred Deer del director de origen griego Yorgos Lanthimos. En el guion cuenta con la colaboración de su compatriota Efthymis Filippou. A caballo entre el terror y el drama, sus películas se adentran dentro del absurdo en lo extraño de la vida. Como muestra su film, que tuvo tan buena acogida allá por el 2009, Canino. En la que estamos hablando hoy nos cuenta una historia perturbadora que puesta en manos de un director de origen asiático, por ejemplo, habría acabado con toda la pantalla llena de sangre. Su toque personal evita eso dedicándose más a intuir que a mostrar. Suponemos que el público que tira más por la primera opción se habrá quedado un poco desencantado, pero no dar la batalla por pérdida, precisamente puede llegar a ser más impactante ese tono frío y algo impersonal. En el apartado interpretativo nos encontramos ante grandes nombres. Un convincente Colin Farrell (Última Llamada y Alejandro Magno) encabeza el reparto. A continuación, tenemos que nombrar a la siempre eficiente Nicole Kidman (Eyes Wide Shut y Stoker). Para acabar nombrar a los jóvenes Raffey CassidyBarry Keoghan y Sunny Suljic, que bordan sus papeles. Steven es un brillante cirujano que toma bajo su protección a un adolescente que poco a poco se va introduciendo en su familia. La adaptación de la tragedia de Eurípides se vuelve totalmente libre.

Mom and Dad es nuestro siguiente film. En su dirección y guion Brian Taylor, especialista en cintas de acción que en esta ocasión se pasa al terror. En su biografía películas del calibre de Ghost Rider: Espíritu de Venganza, Gamer: Juegan Contigo y Crank – Alto Voltaje, para que veáis por dónde van los tiros. Como iréis suponiendo nos encontramos ante un título violento, con un montón de asesinatos groseros y con un ritmo frenético. No se me ocurre otra cosa que recomendarla a todo aquel que se lo quiera pasar bien, lo cual quiere decir que las salas dónde se proyecte estarán llenas. El elenco es de lo más atractivo. Para empezar nuestro querido Nicolas Cage. Curtido en innumerables batallas de todo tipo, parece que a medida que transcurre el tiempo se atreve con obras que nunca llegaríamos a pensar que protagonizaría. Entre sus numerosas apariciones en la gran pantalla destacaríamos Cotton Club, Leaving Las Vegas, Asesinato en 8 mm. y, más recientemente, Dog Eat Dog. Como partenaire Selma Blair (Hellboy y In Their Skin). Una adolescente y su hermano pequeño deben sobrevivir a las 24 horas más peligrosas de sus vidas, en un día en el que una masa de histeria y odio, de orígenes desconocidos, obliga a los padres a comportarse de manera violenta contra sus propios hijos.

Nos encontramos a continuación con una coproducción Reino Unido, Canadá y Estados Unidos llamada Wind River de Taylor Sheridan autor también del guion. Recordar que en ésta última faceta nos encontramos con el responsable del screenplay de Sicario de Denis Villeneuve y de Hell or High Water de David Mackenzie. Como director parece que la cosa no va a menos, a pesar de tener un solo trabajo con anterioridad, pero este es la terrorífica Vile de 2011. Parece que Sheridan siente fascinación por las películas del Oeste, ya que a pesar de no pertenecer concretamente a este género, Wind River se mueve en ese mundo en el que parece que no hay más reglas que la supervivencia. Vamos a hablar de los actores. Un prolífico Jeremy Renner encabeza el reparto. Entre sus títulos destacar Arrival, Misión: Imposible y La Gran Estafa Americana. Seguimos con Kelsey Asbille (The Amazing Spider-Man y Run) y acabamos con Julia Jones (Saga Crepúsculo). Un cazador de coyotes está traumatizado por la muerte de su hija, que un día encuentra el cadáver de una chica en el bosque. Eventualmente recurrirá a la ayuda de una inexperta agente del FBI para averiguar quién es el responsable.Le Serpent aux Mille Coupures de Eric Valette. En el guion cuenta con la colaboración de Hervé Albertazzi. Encontrábamos a faltar un thriller com il faut, a la francesa, con ese toque maligno y en cierta manera travieso, con el que los cineastas de ese país envuelven sus producciones y que alcanzó su zenit allá por los años ochenta. En este film Valette no duda en introducir la tortura, con el agravante de ser infringida a un personaje femenino, mediante una especie de homenaje al cine asiático, no el balde el torturador es Terence Yin (Zombie Fight Club y Fuego Cruzado). En el apartado más europeo del elenco tenemos a Tomer Sisley, Pascal Greggory y Stéphane Debac. Un misterioso fugitivo se ve obligado a esconderse en una granja aislada con la pequeña familia que la ocupa. Un asesino contratado casi inhumano, se lanza tras él para hacerle pagar el asesinato de un padrino sudamericano.

Ha sido un gran día, como prueba los excelentes films que hemos comentado, había muchos más, pero si nos dedicáramos a comentarlos todos estaríamos aquí hasta la edición número cincuenta y uno.