Entrevista al director Sam Firstenberg


Entrevista realizada en el Festival Grossmann 2019 al director Sam Firstenberg.


¿Cuándo decidiste ir a Hollywood para rodar película?

Crecí en Israel, en Jerusalén, y cuando terminé en el instituto lo único que sabía es que me encantaba ver cine. Ingresé en el servicio militar obligatorio israelí que dura tres años. Y al finalizarlo, con 21 o 22 años, ya había decidido que quería dirigir películas. ¡Pero no sabía nada sobre cámaras, fotografía!¡nada! Así que viajé a Los Ángeles para encontrar una buena escuela de cine.


¿Cómo llegaste a trabajar para Mehanem Golan?

Ah, Cannon. Llegué a los Ángeles en 1972 y aún sin terminar la escuela de cine conseguí un trabajo de cámara en una estación de televisión. Un día, en una fiesta de año nuevo en 1973 o 1974 me presentaron a Menahem Golan, quien era una leyenda en Israel debido a sus películas y que vino a Hollywood para dirigir Lepke con Tony Curtis. Y bueno, me lo encontré en la fiesta, empezamos a hablar y me contó que iba a empezar a producir películas; le dije que si me dejaría trabajar con él y cuando me preguntó qué sabía hacer le contesté que nada, así que empecé llevando café a los directores y moviendo sillas.

Mi relación con Golan era buena así que me llevó como su asistente al rodaje de Diamonds con Robert Shaw y luego fui asistente de dirección para otras películas que no eran de la Cannon. Cuando terminé la escuela de cine di el salto.


Has trabajado en distintos géneros de cine, ¿cuál es tu favorito?

Mi primera película fue un drama social, pero enseguida acabé dirigiendo películas de acción. Los años siguientes volví a dirigir acción, dirigí el musical Breakdance 2: Electric Bogaloo, la de ciencia ficción Ciborg Cop 2… Y me siento cómodo dirigiendo acción, algo que no había pensado al principio de mi carrera.

Ahora tengo 69 años y como espectador estoy más interesado en el drama social, la acción es para gente más joven. Pero bueno, me sentía bien rodando películas de acción, al público le gustaban… Era una buena combinación.


Has trabajado con todo tipo de actores y actrices. ¿Hay alguien con quien te gustaría haber rodado?

Mi carrera como director nunca me permitió pasar del Nivel B al Nivel A, aunque he trabajado con Michael Dudikoff o John P. Ryan nunca pude trabajar con Tom Cruise o Tom Hanks.


¿Cómo una saga de acción como la de Ninja llega a su tercera parte y se vuelve una película con elementos de terror?

Después de terminar Revenge of the Ninja, Menahen Golam me dijo “¿por qué no hacemos la tercera con una mujer?” y yo contesté “muy buena idea”; para nada, era una idea horrible. Sho Kosugi, nuestro hombre en Revenge of the Ninja, dijo que si la protagonizaba una mujer ninja él no iba a participar. Estuve pensando cómo unir a Kosugi y a la mujer, en ese momento estaba arrasando en las taquillas Poltergeist de Tobe Hooper así que le dije a Kosugi “¿qué te parece si ella está poseída por el espíritu de un ninja?”, me dijo que perfecto porque entonces la mujer no era ninja sino que estaba poseída por un espíritu. También me inspiré en la película The Exorcist porque fue la primera película de terror que vi en mi vida. Así que un poco de Poltergeist, otro poco de The Exorcist, algo de Flashdance… Quedó algo muy alocado que se ha convertido en una película de culto, se proyecta en festivales, recibo mails preguntándome por Ninja 3: La Dominación, hay webs dedicadas a la película… Y esto tuvo lugar gracias a esa mezcla extraña de circunstancias: Golam quería a la mujer, Kosugi no la quería y yo vine con la idea de Poltergeist.


¿Cuál es tu película de terror favorita?

The Exorcist, fue la primera película de terror que vi y era tan potente... Tal vez porque trabajo en películas, cada vez que veo películas de terror pienso en cómo se ha rodado y en la mecánica… Pero The Exorcist me aterrorizó… Últimamente he visto Paranormal Activity. Una película muy interesante e inteligente a pesar de tener ese presupuesto tan bajo… No me gustan los slashers pero me encanta la saga de Elm Street que es excelente.