Hostile review



Juliet intenta sobrevivir, tras un rápido colapso de la civilización, buscando alimentos para una pequeña comunidad. Pero tiene un accidente con el coche en una de sus misiones y queda gravemente herida en medio de la nada y con una criatura que le acecha. En esos momentos piensa en como era su vida antes de llegar a ese momento.


Título original: Hostile

Año: 2017

Duración: 83 min.

País: Francia

Director: Mathieu Turi

Guion: Mathieu Turi

Música: Fréderic Poirier

Fotografía: Vincent Vieillard-Baron

Reparto: Brittany Ashworth, Grégory Fitoussi, Javier Botet, Jay Benedict, Andreas Pliatsikas, Rob Tunstall, Richard Meiman, Laura D'Arista Adam


Entre la acción apocalíptica y el drama romántico.

Hostile es una extraña mezcla de géneros que toma elementos de otras películas para contar su propia historia. Esto hace que hayan pocos momentos realmente originales en esta cinta, lo que no quiere decir que no tenga buenas ideas en algunas ocasiones (mayoritariamente en las escenas de acción) pero se echa en falta algo más de ingenio en el argumento, pues el espectador siempre va un paso por delante del hilo narrativo lo que no se puede catalogar como algo positivo. Pero tranquilos, la valoración de la cinta acaba en positiva.


Juliet intenta sobrevivir, tras un rápido colapso de la civilización, buscando alimentos para una pequeña comunidad. Pero tiene un accidente con el coche en una de sus misiones y queda gravemente herida en medio de la nada y con una criatura que le acecha. En esos momentos piensa en como era su vida antes de llegar a ese momento.

Película que corre en paralelo en dos épocas totalmente diferentes, pero con el juego argumental de estar en una situación que recuerda indirectamente a otra. El problema es que son demasiado distintas, en una tenemos un ingenioso argumento que nos lleva a una situación extrema, con Juliet atrapada en un vehículo volcado, con una importante herida en la pierna, poca munición y un horrible monstruo que no cejará en su empeño para acabar con ella. Es tensión bien dirigida, con pocos elementos pero todos necesarios y una interpretación más que correcta. En cambio, la otra línea argumental que sucede en nuestro tiempo está repleta de clichés, un producto para televisión con nada demasiado novedoso y en varios momentos pasada de dramática. Tal vez no sea un especialista en el género romántico pero no vi demasiadas diferencias en estas escenas que en cualquiera de los cientos de subproductos que pueblan las televisiones de las sobremesas. Y el mayor error de Hostile es repartir la duración de cada una aproximadamente 30-70, tenemos mucho más de lo malo y bastante menos de lo bueno.

Dirige el francés Mathieu Turi, quien también firma el guion. Tras una importante carrera como director de segunda unidad en importantes producciones como Malditos Bastardos, Sherlock Holmes: Juego de sombras o Lucy, y con Hostile vemos su debut como director. Si obviamos un importante y demoledor error de racord en una de sus escenas (una que acontece en la galería de arte donde Juliet y Jack se conocen, a ver si la encuentras). Es una película con un bajo presupuesto, supongo que por eso se les da más cancha a las escenas rodadas en interiores convencionales, pero se le da todo el crédito en una buena producción. Tal vez algunos espacios más en la línea que acontece el futuro habrían estado bien, pero al menos los pocos que hay lucen correctos. Protagonizan Brittany Ashworth (The Crucifixion) y Grégory Fitoussi (Guerra Mundial Z), en las escenas del pasado ambos personajes no pueden ser más clichés, ella como la rebelde bala perdida y él como el acaudalado rescatador... vimos algo parecido en Pretty Woman. En cambio, las escenas del futuro el personaje de Juliet es mucho más interesante. Quizás se podría haber hecho algo mejor en el maquillaje, pues se desconoce cuántos años pasan entre unas escenas y otras pero, indudablemente, deben de ser bastantes, pero ella luce exactamente igual. Un proceso para envejecerla un poco hubiera estado bien. Algún día habría que darle un premio a Javier Botet ([REC], El laberinto del fauno), se está poniendo en la piel de todo monstruo que aparece en pantalla desde hace ya bastantes años.


La película interesante es “Lara Croft en la tierra de Mad Max” pero en este caso hay bastante más de “chico conoce a chica”, una pena porque las escenas de acción tienen inventiva, el personaje de Juliet es carismática y su resolución, aunque algo predecible, es satisfactoria.

Firma: Oriol Hernández.