Sinnside review


Título original: Sinnside

Año: 2013

Duración: 13 min.

País: España

Director: Miguel Ángel Font Bisier

Guión: Miguel Ángel Font Bisier

Música: Isabel Latorre

Fotografía: Cayetano Gonzalez

Reparto: Lucía Stoks, José Soler, Ramón Orozco, Cristina Martínez, Sasha Marini, Belén Riquelme, Ángel de Miguel, Enrique Victoria, Anastasia Senko, Tania Martínez, Álex Boyer, Manuel Ruiz, Pavel Gorny, Zaida Martínez, Eva Zuñiga, María Zuñiga, Ignacio Bort, Javier Albero


Un terror que fluye suavemente.

Tras un inicio tremebundo, que hace que se nos caiga la baba por la comisura de los labios, y con un alarde técnico que recuerda, aunque sea vagamente, a Polar Express de Robert Zemeckis, Miguel Ángel Font Bisier nos presenta otro excelente trabajo, el cual lleva grabado su marca de fábrica.

La calidad innata en todas sus producciones hace que, en este caso también, de principio a fin asistamos a una sucesión de imágenes sumamente bellas, donde hasta el más mínimo detalle está cuidado al máximo. Empezando por unos extraordinarios efectos digitales, siguiendo por una composición musical que hace las veces de pegamento para ligarlo todo, y acabando con una fotografía deslumbrante en la cual destaca una muy acertada explosión cromática. Dicho de otra manera, arte audiovisual en todo su esplendor.

De todas formas y profundizando un poco más, nos encontramos con una historia un tanto confusa, no por lo que se explica, si no por otros condicionantes. El hecho de estar rodada con niños hace que pierda truculencia aunque gane en frescura. Es decir, se deja en el camino parte de esa cosa que en el género del terror podríamos denominar como contundencia, o empleando otras palabras, toque de maldad. Me viene a la memoria la espeluznante ¿Quién puede matar a un niño?, del maestro Narciso Ibáñez Serrador, aunque en este caso creo que las comparaciones no son del todo válidas.

Vamos a explicar una pequeña sinopsis del film. Una niña sigue un rastro de apetitosas golosinas. Éste le lleva ante la puerta de un extraño restaurante. En su interior se prepara un gran festín elaborado por un siniestro cocinero. El tempo lo marca un original reloj de arena. Lo habéis adivinado, el pecado está en el interior.

El guión, del mismo Miguel Ángel Font Bisier, nos intenta explicar, de forma razonablemente entendible, un cuento hecho por niños y, ¿por qué no decirlo?, para niños. Estos se quedaran maravillados al verlo, al igual que los adultos. Su desarrollo juega entre mostrarnos a unos personajes adultos, que bien podrían parecer monstruos sacados de la Cabaña en el Bosque (Cabin in the Woods), o que también podría ser como ven los niños a cierto tipo de personas mayores. Como marca de la casa, parece que las interpretaciones carezcan de importancia, cuando en realidad no es así. Esta obra es muy coral, y tanto los papeles infantiles como el resto están muy conseguidos. Destaca la pequeña y casi escondida aparición de Belén Riquelme, la cual sabe incorporar a su personaje cierta dosis perturbadora, lo que encontramos a faltar en el resto, simplemente basta su boca haciendo una mueca perversa para que su personaje sea uno de nuestros favoritos. Destacar el excelente trabajo de David Chapanoff, José Rodríguez y Charli Soler en el campo de los efectos especiales y maquillaje. No nos olvidamos de Isabel Latorre autora de la magnífica banda sonora, ni del director de fotografía Cayetano González.

Para acabar deciros que estamos ante una obra que no pasará inadvertida. La calidad que desprende es deslumbrante. Tanto da si buscáis algo más de truculencia, el producto final es para quitarse el sombrero. Para regocijo de los amantes del arte.

Firma: Josep M. Luzán.