The Orphan Killer review


Título original: The Orphan Killer

Año: 2011

Duración: 82 min.

País: Estados Unidos

Director: Matt Farnsworth

Guión: Matt Farnsworth

Fotografía: Matt Farnsworth, Aaron Medick

Reparto: Diane Foster, David Backus, Matt Farnsworth, James McCaffrey, John Savage, Karen Young


El nuevo asesino en serie del siglo XXI.

Unos ladrones de poca monta lo vieron nacer. La iglesia lo crió, le dio su poder y su sello distintivo. Su hermana hizo el resto...

El director Matt Farnsworth después de dirigir Iowa en 2005 da el salto al género de terror muy acertadamente con The Orphan Killer.

Al ritmo del metal más duro, el paladín del diablo Marcus Miller repartirá su particular justicia a todo el clero que se cruce en su camino y, porque no, a toda jovencita inocente o ancianita desamparada. Jason Voorhees y Michel Myers quedan a nivel de un pequeño boy scout con navaja suiza en mano. El hijo descarriado de Dios, Orphan Killer para los amigos, con un nivel de brutalidad y gore desbordante hará las delicias de los amantes de los slashers ochenteros que tan buenos momentos nos han brindado. Una película muy gamberra y sin pretensiones que da lo que promete.

Tal vez su actriz principal, la bella Diane Foster, o el rompedor David Backus no ganen el Oscar a la mejor interpretación, pero sus actuaciones no pasan desapercibidas e, insisto, a todos los amantes del género slasher les costará olvidar a esta pareja singular y su pequeña relación amor-odio.

La historia cuenta la vida de dos pequeños hermanos (Marcus y Audrey Miller) que tras un trágico suceso quedaron huérfanos. El pobre Marcus, con un trauma que marca de por vida y obsesionado en proteger a su hermanita de todo aquel que se le acercara, se descarrió un poco del rebaño de Jesús. Eso sí, las monjas del orfanato intentaron devolverlo, a golpe de fusta, por los senderos de nuestro señor. Y, como el niño seguía en sus trece, pasaron al plan B: Le regalamos una máscara de asesino en serie y lo alimentamos durante 20 años de odio y dolor. Para rematar, le arrebatan lo que el más quiere en este mundo, su único lazo entre la cordura y la locura: su hermana. El cóctel más explosivo que se puede crear está listo. Es el momento que Orphan Killer se muestre al mundo, y para ello cuenta con un arsenal más imponente y variopinto que el del ejército americano. Se abrirá camino a golpe de machetazo, hachazo y heavy metal. Coged un buen paquete de palomitas y preparaos para un festival de hemoglobina.

LARGA VIDA A MARCUS MILLER!

Firma: Omar Parra.